Con la aprobación de las modificaciones al Plano Regulador Comunal (PRC) por parte del Concejo Municipal, la Empresa Portuaria de San Antonio (Epsa) cuenta con el cambio de suelo necesario para desarrollar los proyectos de expansión portuaria en el borde costero sur y a la vez generar la renovación urbana en el lado norte. Esta será la segunda etapa de un proceso largo que debiera terminar en ocho años más, con un puerto consolidado como el principal de Chile.
El gerente general de Epsa, Aldo Signorelli, destacó la importancia del voto favorable del Concejo Municipal para el nuevo PRC. 'Lo más relevante es que esto consolida nuestra vocación portuaria y viabiliza, factibiliza, genera grandes condiciones para que el Puerto de Gran Escala (PGE) se construya aquí en San Antonio'.
Para Signorelli, 'la vocación portuaria' de San Antonio exige responder a las necesidades de contar con 'un puerto moderno y grande. La gente quiere un puerto moderno, la gente quiere control de los camiones, la gente quiere renovación urbana'.
A escala humana, explicó Signorelli, el PGE implicará 'más empleo y más impacto económico favorable para la comunidad'.
En el transcurso de los próximos meses el trabajo de Epsa estará enfocado a seguir avanzando en los estudios de ingeniería y la licitación del PGE, lo que también dependerá de las definiciones que tome el Estado sobre la instalación de un megapuerto en la zona central del país, disputa en que San Antonio corre con ventajas.
En lo inmediato, Epsa debería cerrar los contratos de licitación para la construcción de su edificio corporativo, que, ubicado en el sector de Camanchaca, será un espacio abierto para la comunidad, tal como lo confirmó Signorelli.
Así se sucederán en orden cronológico la ejecución de los trabajos para dar forma a la extensión norte del Paseo Bellamar, el nuevo paseo costero y el parque natural de Llolleo.
Para el desarrollo de todas las fases del PGE, Signorelli dijo que se respetarán 'las observaciones' que hicieron los concejales Esteban Hinojosa y Manuel Meza, que rechazaron los cambios al PRC.
En esa línea, el gerente general de Epsa enfatizó que el PRC se sometió a una evaluación y 'es el único plano regulador que tiene una aprobación ambiental en la región, y uno de los pocos del país durante los últimos años'.
Además, Signorelli insistió en que el foco de Epsa estará puesto en dar seguridad a los trabajadores, mantener un control en el tránsito de camiones y en tender al mejoramiento de la conectividad del puerto.
'El Puerto de Gran Escala va a tener unas instalaciones de policlínico a la altura de un puerto de más de 2.000 trabajadores', asumió. Así también el PGE incluye en su planificación que un 30% de las cargas que se movilice en el puerto de San Antonio se traslade vía ferrocarril, lo que supone un enorme alivio para el abultado tráfico de camiones. Si a esto se sumara la nueva Ruta de la Fruta, la situación en 10 años podría cambiar bastante. J
l Consultado por lo que pasará con los pescadores de la ribera del río Maipo a raíz del desarrollo del PGE, Aldo Signorelli fue enfático en destacar que para abordar estas realidades 'es obligación nuestra' realizar los estudios de impacto ambiental.