Un negro fin de semana tuvo la Universidad de Chile. Al mal resultado deportivo conseguido ante Magallanes (1-3) por la Copa Chile, se sumó un hecho extrafutbolístico que podría complicar el presente del cuadro universitario.
El hincha que el sábado fue víctima del estallido de una bomba de ruido mientras presenciaba el partido del club azul con Magallanes en el estadio Santa Laura, ayer sufrió la amputación de su pie izquierdo debido a las severas lesiones que le provocó el artefacto explosivo.
Se trata de Nicolás Esteban Correa Castro, de 18 años, quien hasta ayer se encontraba 'estable dentro de su gravedad', de acuerdo a lo informado por el capitán de Carabineros Rodrigo Hidalgo.
El joven permanece internado en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital San José, recinto donde fue intervenido quirúrgicamente.
La Fiscalía investiga si el joven manipulaba el artefacto o si el daño sufrido fue por culpa de un tercero.
Al respecto, el capitán Correa sostuvo que 'la organización de cada recinto es responsable del control de los filtros de las personas, y a veces ocurre que no son muy exhaustivos en ese tipo de revisiones'.
Por su parte, la Asociación Nacional de Fútbol Profesional anunció que tomará acciones legales en contra de quienes resulten responsables, con la finalidad de que este tipo de hechos no vuelva a repetirse.
Una acción similar emprenderá la Intendencia Metropolitana, que también confirmó acciones legales por los incidentes ocurridos el sábado, para lo cual ayer se encontraba recabando los antecedentes respectivos. La querella contra quienes resulten responsables se presentará en el transcurso de la jornada de hoy. J
l La bomba de ruido estalló en la barra de la Universidad de Chile cuando se cumplían 37 minutos de partido ante Magallanes por la Copa Chile.