Conducir en estado de ebriedad es malo. Chocar con alcohol en el cuerpo es aún peor. Pero hacerlo contra un recinto militar se convierte en todo un condoro.
Esta calamidad fue la que le ocurrió a un conductor la noche del jueves pasado, cuando impactó de lleno su vehículo contra el recinto de la Escuela de Ingenieros Militares de Tejas Verdes.
El hecho se registró cerca de las 23 horas y según testigos del accidente el hombre no logró controlar su vehículo tras una curva que da hacia calle Los Claveles.
El conductor chocó de lleno contra la pandereta ubicada afuera del sector de las cocinas del recinto militar.
Ambas murallas de vibromán quedaron destrozadas y el vehículo, un station wagon marca Ford modelo Explorer, sufrió daños al quedar incrustado.
Luego del hecho fueron los propios militares quienes tomaron contacto con Carabineros.
Hasta el lugar llegaron policías de la Subcomisaría de Llolleo para acoger el procedimiento y en el mismo lugar los carabineros detectaron que el chofer conducía con hálito alcohólico.
El hombre fue trasladado hasta el hospital Claudio Vicuña para revisar sus lesiones y para ser sometido a la alcoholemia.
El sujeto quedó detenido por su responsabilidad en el accidente y ayer pasó a control de detención en el Juzgado de Garantía de San Antonio.
El conductor, identificado con las iniciales S.R.N.L., fue formalizado por los delitos de conducir en estado de ebriedad y por daños contra bienes fiscales.
Además se determinó que los daños provocados en el recinto militar habrían sido cercanos a los 600 mil pesos.
A primera hora de ayer el muro de la Escuela de Ingenieros Militares de Tejas Verdes ya se encontraba reparado, pues rápidamente ya habían repuesto el vibromán que fue arruinado. J