Cada vez que se acerca un nuevo aniversario de la muerte de Hugo Santana Pino (20), la pena embarga a Anabella, madre de la víctima fatal.
A tres años del fallecimiento de su hijo, esta mujer no logra reponerse de la repentina partida de Huguito, quien falleció la noche del 20 de agosto de 2011, luego de recibir un disparo, mientras uno de sus amigos manipulaba un arma de fuego.
Hasta ahora, Anabella no logra entender qué sucedió esa noche, ya que según ella, hay muchos cabos sueltos que siguen dando vueltas en su cabeza.
'Han pasado tres años de la muerte de mi hijo y, por ejemplo, aún no me entregan la ropa que él andaba trayendo esa noche. Además el caso de mi hijo pasó por tres fiscales y nosotros pusimos una denuncia en contra de uno de ellos, que finalmente quedó en nada', contó Anabella.
'La verdad es que estoy muy, pero muy decepcionada de todo lo que pasado, porque el joven que hizo esto anda por ahí feliz de la vida, mientras que yo jamás volveré a ver a mi hijo...y eso no es justo porque él no merecía morir así ya que era un joven muy especial, desde chiquitito lo fue', agregó.
Según Anabella, su hijo se habría salvado, si es que hubiera sido trasladado al hospital a tiempo, luego de recibir el impacto que final mente le quitó la vida.
'El informe dice que mi hijo estaría vivo si lo hubieran llevado a tiempo al hospital, pero acá pasaron muchas cosas extrañas porque primero dieron una versión y después se supo que este joven le había disparado', aseguró.
'Yo estoy muy molesta porque se han dicho cosas que no son ciertas. Las personas que estuvieron ahí esa noche y que saben todo lo que pasó jamás dieron la cara. La noche que mi hijo murió, ellos estaban en el hospital y jamás contaron lo que realmente sucedió ni se acercaron a mí', señaló.
Agregó que 'mi hijo tenía un seguro y para poder cobrarlo tuve que reunir varios antecedentes por eso me he dado cuenta que hay varios cabos sueltos aún, y la verdad es que no sé por qué'.
A pesar de toda la pena, la rabia y la incertidumbre, Anabella se siente muy orgullosa de su hijo y de todo los lazos que construyó en su corta vida.
'Hasta el día de hoy sus amigos le escriben en el Facebook, sus compañeras de curso me vienen a visitar al igual que sus amigos y eso me hace sentir muy orgullosa de mi Huguito, porque fue una persona muy especial, que se ganó el cariño y aprecio de todos quienes lo conocieron'. J
l La madrugada del 20 de agosto de 2011, Hugo Fernando Santana Pino, de 20 años, falleció luego de recibir un disparo accidental en el pecho, mientras uno de sus amigos manipulaba un revólver-calibre 38 milímetros.