El fiscal exclusivo que investiga los atentados ocurridos en Santiago en los últimos meses, Christian Toledo, reconoció ayer que sospechan que al menos tres personas participaron en la instalación del artefacto que explotó el lunes en el Subcentro de la Escuela Militar, que dejó a 14 heridos, siete de ellos de gravedad.
El persecutor comentó que tienen 'varias líneas investigativas', porque a la hora de la explosión había 'bastante gente' en el lugar. Sin embargo, reconoció que los involucrados 'serían más de dos personas', según los antecedentes proporcionados por las cámaras de vigilancia del sector y lo que han declarado testigos.
Toledo evitó confirmar si uno de los sospechosos era un joven delgado, que vestía gorro, bufanda y lentes, y que habría dejado un objeto en el basurero donde explotó la bomba 20 minutos más tarde, según registró una cámara. El fiscal advirtió que esas imágenes no se liberarán.
También deslizó que se mantiene en la indagatoria al vehículo burdeos que salió raudo tras la detonación, pese a que el lunes se había descartado alguna relación.
Entre las líneas investigativas, reconoció que se indaga alguna vinculación del atentado con el rechazo a anular el juicio en que se condenó a los ex lautaristas que asaltaron bancos y mataron al cabo Luis Moyano en octubre de 2007.
La Moneda acordó una serie de medidas para enfrentar la emergencia.
Entre ellas, se determinó el refuerzo de la vigilancia en todos los sectores de alta afluencia de público, incluidas las 100 estaciones del Metro e intermodales. Para ello se destinaron 500 efectivos de Carabineros. Además personal de civil y uniformado subirá a los buses para su vigilancia.
También se anunció querella contra quienes realicen un aviso falso de bomba.
Tras encabezar una reunión de más de dos horas con todas las instituciones relacionadas con la seguridad, la Presidenta Michelle Bachelet aseguró que 'no nos temblará la mano' para perseguir a los autores de 'este acto de cobardía' y hacer que paguen con las penas más altas que establece la justicia.
'Estamos enfrentando un tema de Estado', dijo, y agregó que 'la tranquilidad y el libre desplazamiento de las personas no se van a ver afectados por estas circunstancias'. J