Balmaceda demostró que tiene el corazón más grande que Huracán
Las expulsiones de Andrés González y Wladimir Gaete habían obligado a Balmaceda a tener que hacer un esfuerzo doble en la final de la Serie de Honor que jugaban ante Huracán. "Los Gorriones" vencían uno por cero con anotación de penal en el primer tiempo de su estrella Georgelino Osorio, pero los dos hombres menos en cancha se estaban comenzando a notar.
Era pleno segundo tiempo y los pupilos de William Carrasco tuvieron que ponerse el overol para defender la mínima ventaja que estaban obteniendo y que les estaba dando hasta estos momentos la copa de la Puerta del Pacífico.
Y fue en esos momentos cuando Huracán comenzó a darse cuenta que se le estaba yendo la final de las manos y se fue en busca de la igualdad que llegaría de la mano de una excelente anotación del delantero Ángel Gómez que puso un derechazo rasante a un costado del golero Fredy Bascur para poner el 1-1 y desatar la euforia de todos los hinchas rojos.
El partido era caliente en el recinto de calle México y dos veces el palo le negó la victoria a los pupilos de Patricio Montecino: primero a Julio Leiva y luego con a un cabezazo del mismo Gómez.
Tan caliente estaba el duelo que una entrada fuerte del defensa Juan Orellana significó que los llolleínos terminará los 90 minutos con 10 hombres.
El final del partido obligó a ir a los lanzamientos penales, y los nervios se dejaban sentir al máximo en esa pasarela de tensión y nervios que significa ir a lanzar desde los doce pasos cuando hay tanto en juego.
Juan Carlos Machuca, Julio Leiva y Juan Manzo anotaron penales para Huracán, mientras que Cristián Abrigo, Christián Celedón y Carlos Bustos hicieron lo propio para los albinegros cuando vino el primer punto de quiebre de la serie: Javier Navarro, que como lateral derecho había sido la figura de los rojos, disparó muy despacio y Fredy Bascur no tuvo problemas para contener el remate y darle la ventaja a su equipo.
Y cuando todos en Balmaceda pensaban que la serie se definía con el último penal en los pies de Georgelino Osorio, el disparo del histórico delantero fue detenido por Renato Vargas quien volvió a darle aire a los huracaninos.
Sin embargo el volante Francisco Rojas volvió a fallar el penal para los rojos, entregándole la posibilidad a Julián Muñoz de que con su remate el título se fuera a las huestes gorrionas.
El volante definió con frialdad a un costado del arco defendido por "La Araña" Vargas dando rienda suelta a las celebraciones de los jugadores, cuerpo técnico, dirigentes e hinchas del Atlético Cultural Balmaceda.
Una vez finalizado el encuentro y previo a la ceremonia de premiación, un emocionado entrenador William Carrasco aseguró que la clave "fue que mostramos mucho más corazón que Huracán".
Es que con dos hombres menos, el equipo de Carrasco demostró de qué madera está hecho, ya que como reafirma el DT "somos los mejores de Chile, y eso tenemos que demostrarlo en este tipo de finales". J