Los pasillos del Hogar el Redil están en silencio. Las figuritas que forman parte del taca taca están más quietas que nunca y los juegos para niños son un mero adorno del recinto ubicado en avenida Chile y que fue inaugurado en 1939.
Por el desértico centro, que atendió a más de tres mil 800 niños, se mueve uno que otro funcionario y uno de ellos es el director del establecimiento, Juan Espinoza Isla (49), quien por cuatro años fue el encargado del lugar y revela que a fin de años, en diciembre, el recinto cerrará sus puertas.
"El tema está zanjado", reconoce Espinoza. Es que hace más de un año que este oficial del Ejército de Salvación, a cargo del cuidado de los niños y mantenimiento del recinto, viene reuniéndose con el Servicio Nacional de Menores para que nuevos niños ingresen al hogar.
"El Sename quiere que a nuestro hogar se incorporen niños de alta complejidad. El problema es que nuestro recinto no está preparado para esto. La oferta que nos ofrecieron no nos convenía. Así que como no había financiamiento el hogar se va a cerrar", aclara.
El hogar actualmente atiende a 16 niños, los que según explica el director, fueron pasados a llevar en sus derechos básicos.
"Son menores que sus padres están en la cárcel, que los abandonaron o que el tribunal está decidiendo que hacer con los niños. Pero acá no tenemos niños que tengan problema con la justicia. Y estos jóvenes quieren que nosotros los recibamos y no estamos en condiciones", cuenta.
La experiencia del Redil con este tipo de "menores de alta complejidad" no ha sido de las mejores como lo recuerda José Espinoza.
"Tuvimos a unos jóvenes acá y son complicados. Son personas que siempre andan armadas y además los tribunales quieren que estén encerrados y nosotros no tenemos ese régimen y eso le molestaba al Sename, porque nosotros nos basamos en una relación de confianza con los menores", describe.
Además agrega que "no es bueno trabajar con niños tan distintos, porque el trato que se les da es completamente diferente".
El terreno que pertenece al Ejército de Salvación no tiene claro qué hará luego del cierre, pero Espinoza Isla asegura que seguirán trabajando en un proyecto social, "porque esa es la labor de nuestro ejército: trabajar por una mejor sociedad y esperamos que el 2016 tengamos concretado el proyecto y estemos trabajando por la comuna". J
l Juan Espinoza, director del hogar de menores El Redil explicó que debido al cierre del centro, los niños serán derivados a otros establecimientos y que también los funcionarios serán lamentablemente despedidos. "Yo llevo cuatro años a cargo del hogar y es una pena lo que está pasando porque uno vive acá, conoce a los niños y al personal. Lamentablemente tras el cierre ellos no seguirán con nosotros", dice.