Tras su separación Teresa Briceño (25) decidió entregarle el cuidado personal de su hijo de tres años al padre.
Ella asegura que no tenía para dónde ir ni a quién recurrir, por eso optó por ese camino.
"Además mi ex era muy buen papá, por eso siempre pensé que mientras yo buscaba un lugar donde vivir con mi hijo, era conveniente que se quedara con él, que vivía en buenas condiciones", explica la joven.
Teresa asegura que jamás dejó de ver a su hijo, y que, según lo establecido por el tribunal de familia, ella se quedaba con el menor de martes a miércoles.
"Cuando logré estabilizarme y arrendar una casa, le dije a mi ex que me entregara al niño, pero éste no quiso. No tuve más opción que recurrir al tribunal, quien decretó que yo me quedara con mi hijo de martes a miércoles", cuenta.
Según la joven, tras la separación su ex pareja dejó de trabajar, excusándose en que debía dedicarse al cuidado del niño y además demandó por pensión alimenticia a Teresa, quien debía cancelar mensualmente 76 mil pesos.
"Lamentablemente mi ex comenzó a tomar todos los días y las tías del jardín me decían que mi hijo a veces venía desaseado. Además el niño pasa todo el día en el jardín y él perfectamente podía trabajar. Vecinos también me contaban que mi ex tomaba con el niño en la casa. Incluso un miércoles en que vine a entregarle al niño, él estaba tomando con un vecino. Ese día llamé a carabineros, pero no pudieron hacer nada", agrega.
Según Teresa esta situación volvió a repetirse este miércoles cuando fue a dejar al menor a la casa de su padre.
"Llegué con el niño y lo sorprendí bien curao. Estaba tomando con un vecino, así que le dije que no le iba a entregar al niño, pero se puso muy violento, y al final logró quitarme a mi hijo mientras amenazaba con pegarme", cuenta.
"Nuevamente llamé a los carabineros para que me ayudaran porque yo no quería dejar a mi hijo ahí", añade.
Carabineros ingresó al inmueble y sorprendió al menor semidesnudo mientras su padre consumía alcohol.
"Intentó oponerse a la detención, además amenazó a los carabineros. Incluso a uno de ellos le alcanzó a dar un golpe. No quería entregar a mi hijo, pero en un descuido él pudo zafarse y correr a mi lado", explica la joven, quien permanecía en las afueras de la casa a la espera de que le entregaran a su hijo. J
l Fuentes de Carabineros explicaron que el sujeto, de 41 años, fue detenido en su casa en Cantera, por desacato, vulneración de derechos, oponerse al acción policial, insultos y amenazas a carabineros y porte ilegal de arma blanca. Esta última fue encontrada entre sus vestimentas cuando se encontraba en el hospital constatando sus lesiones, después de ser detenido.
En tanto, el menor fue entregado a su madre, mientras espera la citación del tribunal de familia, quien determinará el destino de este pequeño de tan sólo tres años.