Escándalo en programa MasterChef: sanantonina fue a parar a la clínica
Apocos días de su regreso al programa MasterChef tras ganar el repechaje, la linda sanantonina Alejandra Orellana no lo está pasando bien en el espacio de Canal 13. Intrusos, el programa de farándula de La Red, reveló ayer que ex alumna del People Help People sufrió una intoxicación tras consumir un sándwich en mal estado que le habría dado la propia producción del programa culinario.
La noticia de la llolleína de intensos ojos verdes se convirtió en una de las principales de la última edición de Intrusos, que calificó lo sucedido con Alejandra Orellana como "un verdadero escándalo".
De acuerdo a los antecedentes expuestos en la nota de Intrusos, la representante de San Antonio habría resultado con una infección intestinal luego de comer el alimento en mal estado. Los dolores habrían obligado a la producción a trasladarla hasta una "reconocida clínica capitalina" y posteriormente habría sido derivada a un centro médico de San Antonio, según señaló el programa de la Red.
Según el mismo espacio, el sándwich que intoxicó a la guapa sanantonina "habría quedado de un día para otro debido a la postergación de las grabaciones".
En reportero de Intrusos le preguntó al productor del programa, Sergio Nakasone, si era cierto lo ocurrido con Alejandra Orellana. El argentino de rasgos asiáticos respondió escuetamente que "está con problemas, pero es normal en toda producción".
Daniela Carro y Paola Avilés, otras dos concursantes del programa gastronómico de Canal 13, no se quisieron referir al tema en cámara. "No sé. Todas hemos tenido problemas de salud. Yo hace algún tiempo me desmayé, pero no puedo dar detalles de nada", indicó Paola Avilés al ser consultada por el notero de Intrusos.
En la nota mostrada ayer, el reportero fue más allá y dijo que los concursantes de MasterChef "no lo están pasando bien debido a las extensas jornadas de grabación y a las deplorables condiciones de trabajo". Incluso se menciona que recibirían apenas $5.000 por cada jornada de trabajo y que los encargados de la producción no tendrían un buen trato con ellos.
Sergio Nakasone desmintió tajantemente estas acusaciones y dijo que los aspirantes al título de Master Chef "están felices. (De lo demás) No estoy al tanto, pregúnteselo a ellos".
Leonora, otra de las participantes, salió en defensa de la producción y, ante las consultas del reportero, respondió que "todo sueño es un sacrificio, y para mí este sacrificio vale la pena".
Daniela Carro comentó en la misma línea. "Todo vale la pena. Estamos contentos y eso se traduce en el programa".
Obviamente la intoxicación sufrida por Alejandra Orellana aún no se ha visto en pantalla y tampoco se sabe si en los próximos capítulos se hará mención a su enfermedad. Diario El Líder intentó comunicarse ayer con ella o con su marido, Gonzalo Vega, pero todos los esfuerzos resultaron infructuosos. Ninguno de los dos respondió sus teléfonos celulares durante la jornada.
Sin embargo, fuentes de diario El Líder confirmaron que efectivamente habría sufrido una enfermedad estomacal y que actualmente se encuentra en proceso de recuperación.
En Intrusos especularon con que la producción les tiene estrictamente prohibido a los participantes efectuar declaraciones a los medios de comunicación.
Después de la nota donde se dio a conocer la intoxicación que padeció la sanantonina, el panelista Michael Roldán reveló que las grabaciones serían tan extensas que los participantes apenas tenían tiempo para almorzar un sándwich y un jugo ofrecido por la propia producción del reality conducido por Diana Bolocco. J