Eran cerca de las 23 horas de este miércoles cuando bomberos de San Antonio fue alertado de un incendio que se estaba produciendo en el Fundo El Trigal, ubicado en la parte alta de Barrancas.
De inmediato se trasladaron al lugar donde los voluntarios debieron trabajar arduamente en la extinción de las llamas, las cuales amenazaban con propagarse y afectar a las casas que colindan con el sector.
Afortunadamente el rápido accionar de los voluntarios impidió que este hecho desatara una tragedia de proporciones.
Cabe destacar que este sector está compuesto por gran cantidad de pastizal y matorrales, elementos de rápida combustión, de ahí su peligrosidad.
sin dueño
Antecedentes entregados por Carabineros de San Antonio indican que el vehículo Chevrolet Monza, fue abandonado por desconocidos quienes le prendieron fuego.
Como el automóvil tampoco tenía su motor, ni su número de chasis fue imposible determinar quién era su dueño, ni su procedencia.
De igual forma el procedimiento quedó a cargo de la Sección de Investigación Policial (SIP) de San Antonio.
vecinos
El siniestro causó bastante alarma entre algunos vecinos quienes aseguran que los actos delictuales se han hecho cada vez más frecuentes en este sector.
"Como este sector es un muy solo, se ha convertido en un antro de carrete, de drogas y de hechos delictuales", señaló un vecino del sector que por temor no quiso identificarse.
"Acá durante las noches pasa de todo y no sólo los fines de semana, sino que todos los días. La mayoría de las personas que vivimos acá estamos asustadas porque cualquier día se va a desatar una tragedia. Más encima este lugar es usado como basural y son muchas las personas que, durante las noches, vienen a botar todo lo que pillan", agregó el vecino.
La molestia de los vecinos también radica en el aumento de pandillas que pululan durante las noches en busca de pleitos con otras bandas rivales, las cuales, incluso han llegado desde Cartagena para enfrentarse a sus enemigos.
"Uno en las noches siente balazos y cómo corren de un lado para otro gritándose todo de tipo de groserías y amenazas. Lo peor es que son puros cabros chicos", explicó Marta, vecina del sector.
"La verdad es que da mucho miedo porque no se puede vivir tranquilo, ya que siempre estamos pensando que una bala loca se va a meter a una casa y que va a matar a alguien", añadió la vecina. J