Tal como pasa en el Nacional cuando llegan artistas internacionales, ayer tempranito comenzó a llegar el público del carnaval de Murgas y Comparsas 2015.
Rosa Jeria y Juana Marambio fueron las primeras en instalase. "Nosotros venimos temprano, todos los años para guardar los mejores lugares y ver mejor", contaron las sanantoninas.
A pesar del viento helado que se mantuvo por casi toda la mañana, las cerca de diez personas que estaban esperando el paso de las murgas y comparsas antes de las once de la mañana, estaban bien armadas con ropa abrigada, bloqueador y comida. La señora Rosa fue cautelosa y llevó solo dos plátanos, en cambio, Juana llevó su termo con almuerzo, arroz con carne y ensalada de apio. Además, por si salía el sol, también tenían un quitasol que los iba a proteger.
Eso sí, evitaron un poco el agua porque a pesar de que los baños estaban instalados desde temprano, podía llegar alguien a quitarles el lugar. "A veces llega gente muy mal educada y sacan lo que uno tiene marcado porque la familia llegan tipo o cinco porque vienen niños chicos", aclaró Rosa.
Ya a la una de la tarde las graderías estaban completamente llenas de personas que iban a disfrutar del show y a apoyar a las comparsas de su sector.
Del otro lado
Otros que estuvieron temprano en el frontis del Municipio sanantonino fueron los trabajadores del Departamento de Cultura, encargados de la producción del Carnaval y de montar todo lo necesario para la inauguración.
Uno de los históricos de este evento es Lorenzo Reyes, quien a sus 70 años era uno de los más entusiastas en la preparación de las tarimas e instalación de todo lo necesario para que esta primera tarde fuera un éxito.
"Llevo 22 años trabajando en la muni y siempre he trabajado en esto, desde antes incluso venía a apoyar al Carnaval, desde que empezó hasta los años en que se perdió y ahora que volvió", dijo don Lorenzo, mientras le explicaba a uno de los jóvenes de la producción cómo se montaba la galería, que en esta ocasión, albergaría a las autoridades y a los invitados.
Tanto él como sus compañeros llegaron a las nueve de la mañana a preparar todo y serán los últimos en irse, "esperemos que entre las dos o tres de la madrugada, porque tienen que terminar de pasar las comparsas y después hay que despejar esto, los cortinajes y lo que se debe retirar, porque el escenario va a quedar montado", manifestó don Lorenzo.
Para el hombre y amante del folclor el secreto que hace tan especial esta fiesta sanantonina "es el trabajo de toda la gente, tanto de los que organizan esto, como de los que trabajamos en armar y, sobre todo, el empeño de cada comparsa", indicó el hombre. J
l Otros que también llegaron tempranito fueron los comeciantes. La primera en instalarse a las nueve de la mañana, fue PaulaAlvarado y su hijo Francisco.
"el año pasado se puso mi cuñada y nos vinimos temprano con mi hijo, que es más comerciante que yo porque queríamos agarrar este lugar que es muy buno", dijo la mujer que espera poner todo lo que gane durante el Carnaval en la libreta para su casa.
Ya a eso de las doce, todos los locatarios habían colocado sus puestos.