Pablo Domingo López Rojas, de 57 años, venia saliendo de una Meningitis que lo mantuvo delicado de salud durante más de un mes. El hombre estaba mejorando, por ello que su repentino deceso tiene a su familia, amigos y vecinos destrozados.
Todos lo lloran por su infinita alegría y lo recuerdan, porque cada año se disfrazaba como Viejito Pascuero para alegrar a peques de hogares de menores.
La tarde del viernes recién pasado, Pablo López se encontraba en su casa de Avenida Chile. Bajaba una escalera cuando repentinamente se desplomó. Una vez en el suelo no se levantó más. Había fallecido.
Domingo López, su hijo, quien lo halló sin vida, explicó que "le dio un infarto. Recién se había recuperado de la Meningitis y ahora fue su corazón lo que le falló. Fue de un momento para otro", expresó aún conmocionado.
Tras desvanecerse no se pudo hacer mucho más. El cuerpo del hombre fue dirigido hasta el Servicio Médico Legal para realizarle una autopsia. Cerca de las 13 horas de ayer lo entregaron a sus familiares para realizar su velorio. Les explicaron que había fallecido de un infarto.
comunidad EJE
Donde más impacto ha causado el fallecimiento de Pablo López es en la comunidad Católica San Eduardo del Encuentro de Jóvenes en el Espíritu Santo (EJE) de Llolleo, donde era un antiguo miembro. En ese grupo participaba de todas las actividades propias del EJE.
Todos los años Pablo López se caracterizaba como Viejito Pascuero para repartir dulces y alegría. Además entregaba café a personas en situación de calle.
"Mi papá era una persona muy alegre, simpático, buena gente, era como un niño pese a ser un adulto. Dejó un vacío muy grande", expresó Domingo López. J
l El velorio del "ejista" Pablo López Rojas (57) se realiza desde ayer en la capilla San Francisco de Asís, ubicada en calle Ginebra del sector La Campiña de Llolleo.
En el mismo templo se llevará a cabo una eucaristía para pedir por su eterno descanso, la cual esta programada para las 15 horas de hoy.
Desde ayer los miembros de la comunidad San Eduardo del Encuentro de Jóvenes en el Espíritu Santo (Eje) se encontraban acompañando los restos del "Tío Pablo". Sus seres queridos están profundamente afectados por el hecho y todos coinciden en que López Rojas era un gran aporte para la comunidad.