El playanchino estará hoy en la práctica del estadio de Concón, pasto sintético y mañana viajará a Santiago para hacerse mediciones y exámenes médicos de rutina que le permitan saber como seguirá su preparación para debutar con Wanderers.
La intención de Pizarro es jugar su primer partido ante Everton, el 5 de agosto próximo (sin público) para luego estar en la Sudamericana. En algún momento, deberá volver a Italia para solucionar temas personales.
Estaba feliz, casi como un niño que llega a colegio nuevo. David Pizarro está disfrutando la vida y se le nota. Ayer llegó pasadas las 9.00 horas a Mantagua e hizo trabajo regenerativo con la oncena que ingresó ante San Marcos de Arica. Trotó un poco y posteriormente se divirtió lanzándoles tiros libres a Gabriel Castellón y David Pérez. En uno de los últimos lanzamientos, el balón se clavó en el ángulo derecho del arquero David Pérez, tercer portero caturro, y de pura felicidad salió corriendo -con los brazos en alto- celebrando su gol.
Wanderers sabía de la expectación que provocaría la primera práctica de Pizarro en Mantagua, por eso dispuso de guardias en el ingreso y recién a eso de las 11.20 horas se pudo ver algo del entrenamiento. Ayer fueron pocos los hinchas que llegaron hasta el recinto caturro, sin embargo la idea fue resguardar el normal trabajo del plantel.
Pizarro demoró casi una hora y media en el camarín, pero tras el masaje, jacuzzi y ducha, atendió a todos los fanáticos que lo esperaban. Hubo invitaciones y peticiones de autógrafos y fotografías y, por supuesto, atendió a la prensa.
Sus primeras impresiones fueron de completa felicidad. Tras el tremendo recibimiento en el estadio playanchino, David Pizarro pasó el trago amargo del empate con San Marcos y ya piensa en su redebut con Everton.
"Me siento feliz, vengo de Playa Ancha y me costó un poco llegar, pues el viaje bastante largo, pero estoy contento de haberme encontrado con mis nuevos compañeros y con este nuevo desafío".
"Estoy empezando de a poco, el miércoles me debo hacer exámenes en Santiago y en base a lo que arrojen esos resultados, vamos a tener la base de cómo será en preparación para llegar lo más rápido posible a jugar", dijo el pupilo del sanantonino Emiliano Astorga.
"Yo conocía el complejo de Mantagua, pues siempre en mis vacaciones venía a compartir con los muchachos. Ahora la cancha donde está el primer equipo es nueva y se puede jugar bien, como me gusta. Estas primeras sensaciones son muy importantes porque hay una responsabilidad grande de mi parte, pero todos sabemos que un solo jugador no puede hacer la diferencia si el colectivo no te sigue".
"El partido del sábado me dejó un sabor amargo, sobre todo de la manera que se tomó el gol. Este tipo de situaciones, la verdad que son preocupantes para un equipo que quiere pelear algo. Sabemos que deben ser 95 minutos de concentración y lo importante es sacar lecciones de lo que fue esa jugadapara que no se vuelva a repetir sobre todo porque hay equipos muy interesantes. Es que no se vio por dónde Arica podía hacernos daño. Esa es la sensación que me dio a mí, pero un gol de esa naturaleza nos lleva a tomar medidas importantes porque este es un torneo corto. Wanderers siempre ha estado con el fantasma del descenso, entonces necesitamos que todo el plantel tenga los pies bien puestos sobre la tierra".
"Claro que se puede hacer una dupla con el 'Negro'. Sin dudas que con Jorge Ormeño vamos a sacar el mejor provecho. Ambos estamos bien, él es un jugador, muy importante el 'Negro' a nivel táctico; es muy inteligente para jugar.
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Ahora a él le toca hacer el trabajo sucio y a mí me deja la parte más rica y más bonita del fútbol".
"Sólo me ha tocado jugar clásicos amistosos con Everton, nada de encuentros oficiales. Trataré de llegar a ese partido (5 de agosto). Esa es mi idea, pero ahora lo que más necesito es el balón"
"Realmente la Copa Sudamericana es mi desafío más importante. Es un torneo internacional donde te ve mucha gente y hay que estar preparados. Es que si nos encontramos con situaciones como pasó con Arica, será difícil sacar resultados sobre todo con un equipo como Libertad de Paraguay, que tiene experiencias en semifinales. Hay que prepararse bien para llegar a ese partido y eso es lo que tengo en mi cabeza actualmente".
"La gente tiene que entender que esto no es llegar y ponerse a jugar de un día para otro. Vengo recién llegando después de la Copa América y quizás si hubiese llegado antes, habría alcanzado a jugar algún partido de Copa Chile. Igualmente yo necesito tiempo para poder hacer una preparación como corresponde; siempre he dicho que es una cuenta de ahorro para no tener lesiones a fin de año"-
David Pizarro pretende jugar el máximo de tiempo posible en Wanderers. Pese a que firmó por sólo un año, la idea del porteño es terminar acá su carrera y seguir haciendo cosas por su querido Valparaíso.
Dentro de los temas domésticos que le interesan al público, pues la Pizarromanía está recién comenzando, el jugador que ocupará la 7 de Wanderers, está viviendo en Playa Ancha, cerca de sus padres y suegros. Como buen porteño, escogió vivir en Valparaíso, acompañado de sus seres queridos y pese a que no le gustó mucho que su mamá saliera tanto en la televisión -durante Copa América, el volante la pasa a ver muy seguido.
"Hago el recorrido completo, salgo de mi casa y paso por donde los suegros y mis papás", reveló Pizarro, quien señaló que sigue siendo el mismo de siempre, sólo que ahora volvió de "chaqueta".
La humildad del Fantasista es a toda prueba. Comenta que come porotos o legumbres todos los lunes; una costumbre que no ha perdido. En Mantagua lo esperaban hinchas con diversas peticiones y él los atendió uno por uno. Si para este viernes ya lo convidaron para un duelo amistoso en la Manuel Guerrero de Barón.
Desde las 19 horas se hará una jornada solidaria para ir en ayuda del Pato Páez, quien jugó en Wanderers y en San Francisco y tuvo un accidente automovilístico.
La idea es reunir ex jugadores caturros con actuales figuras del plantel y jugar ante Colo Colo de todos los tiempos.
Respecto de su familia, ninguno de sus hijos había vivido en Chile, es por eso que tendrán el mes de agosto de adaptación, para luego entrar a clases en septiembre en la Scuola Italiana de Valparaíso.
Si de cercanos se trata, en Mantagua el crack tampoco está tan solo. Además de Ormeño y Villarroel, Pizarro tiene a su cuñado Mauricio Gómez como preparador físico de las series cadetes, también de José Farías, compañero y amigo de la adolescencia, actual preparador de arqueros d los juveniles en Santiago Wanderers. J