Dos semanas alejado de las canchas y de los entrenamientos del plantel de San Antonio Unido estuvo el volante mixto Ignacio Ramírez.
El "Colorado" desde el partido con Trasandino por la cuarta fecha (el fin de semana se juega la décima) andaba con una molestia en el isquiotibial derecho. Se temió una contractura e incluso un desgarro.
Se le practicó una ecografía y se perdió los partidos con Linares, Malleco, Santa Cruz y Naval.
Lo que tiene el campeón mundial de fútbol calle es una tendinitis en la inserción de los isquiotibiales.
Según el traumatólogo Andrés Isaza el mediocampista lila está para jugar "pero se tiene que someter a trabajo diferenciado con el kinesiólogo. Es una dolencia que arrastra hace tiempo, con cuidado estará bien", diagnosticó el galeno colombiano y presidente de la comisión fútbol lila.
Esta semana el "Coloro", como le dicen al interior del plantel, se integró al entrenamiento del equipo de Jorge Miranda. "Me siento cada vez mejor, de a poco estoy volviendo para ser una opción para el profesor y el equipo. Partí el martes recién a entrenar. Es algo más crónico que se tiene que trabajar. Gracias a Dios me he sentido bien", contó tras la práctica de ayer en Estrella de Chile.
Igual anda con cuidado y contó que "voy de menos a más. No voy a tirar toda la carne a la parrilla, como se dice en el entrenamiento. Cuidándome para que esto no vuelva. Con el kine (kinesiólogo) seguimos trabajando y haciendo terapia para que la lesión no se agrave", precisó.
Ramírez tiene que hacer mucha elongación en las prácticas y después aplicar calor, masajes y tomar medicamentos para soltar el músculo. Confiesa que "está ese poco de miedo después de volver, pero quiero ser opción para el profesor este fin de semana. Si no es así seguiré trabajando", prometió. J
El rostro de Ányelo Alvarado lo decía todo ayer después del entrenamiento en el estadio Ramón Alarcón. El volante puertomontino encendió las alarmas del cuerpo técnico lila al sentir una molestia en el aductor de su pierna derecha.
El oriundo de la caleta Anahuac se sometería a exámenes para cuantificar la real magnitud de la dolencia que lo afectó. Una pésima noticia, porque volvió hace tres partidos tras recuperarse de un desgarro.