A Umelda Huenchumil no le viene con cuentos. Ella reconoce a distancia cuando una persona, supuestamente mapuche, lo es de verdad o no. Ha pulido su ojo experto desde muy niña debido a que es nacida y criada en una comunidad indígena en Melipeuco, Región de La Araucanía.
"Yo soy la única de verdad, que aprendió todo esto con su familia. Ahora parece que está como de moda ser mapuche. Anda gente que se viste así, que se disfraza, pero uno las reconoce altiro", dice enfática.
Confiesa que le molesta, pero que no le dice a nada a las personas que, según ella, hacen mal a la imagen de los indígenas. "He visto a unas que andan bien vestidas con el traje, pero que también están bien depiladas, pero se supone que las mapuches no se depilan", agrega.
"Hay algunas que dicen que tuvieron una abuela o que la mamá tenía un apellido, pero no saben ni una sola palabra (de mapudungún). De hecho yo he escuchado gente hablando y dicen unas palabras que no he escuchado nunca", remata.
La mujer se ha hecho conocida en la zona gracias a su trabajo para mantener viva la milenaria cultura. Hace unos años se instaló en la localidad de Quillaycillo, al interior de Lo Abarca, donde gracias al apoyo de distintas instituciones de gobierno levantó una ruca indígena al más puro estilo de La Araucanía. Ella quiere que todo sea auténtico.
En la "Newen Ruka" hace todo a la usanza mapuche: comida, artesanía, rituales médicos y de todo lo que se le pueda ocurrir. Por supuesto la gracia está en que la gente que desconoce estas tradiciones pueda verlas en primera persona.
En la parcela trata de producir la tierra, pero es cada vez más difícil. Así que comenzó a sacarle provecho a sus gallinas para vender huevos. Reconoce que el negocio de turismo "es lento", pero que tampoco se puede quejar. Su mayor logro y reconocimiento es la artesanía.
Hace unas semanas estuvo en la feria de emprendedores que organizó la Municipalidad de Cartagena, donde destacó entre todos sus compañeros. Su relumbre ha sido tanto "que hasta de Viña del Mar me llamaron una vez, no me fue nada mal", recuerda. J
Desde la Autopista del Sol, hay que tomar desvío a Casablanca en cruce Malvilla. Continuar en dirección norte por carretera asfaltada, hasta el cruce con Variante Lagunillas-Casablanca de Carretera Camino Costero. En la "Newen Ruka, Umelda recibe a los turistas con todo tipo de preparaciones culinarias. "Les explico y les enseño de qué se trata todo eso. La idea es que la gente pueda ir y recorrer un rato. Aprender con una persona que sabe de esta cultura desde el nacimiento y no que tuvieron que enseñarle en libros para que después lo ande contando", indicó la mujer.
"He visto a unas
que andan bien
vestidas con el
traje, pero que
también están
bien depiladas,
pero se supone
que las
mapuches no se
depilan",
Umelda Huenchumil,