Cayendo la tarde de ayer llegó a su casa Claudia Fredes Velásquez. Trajeron su cuerpo desde el Servicio Médico Legal de Valparaíso para velarlo en la residencia que compartía junto a sus dos hijos en las Colinas del Mar.
El dolor y la conmoción en dicho sector ayer era evidente. Aún nadie daba crédito a la muerte de la mujer de 44 años. Varias personas llegaron anoche a dar el pésame a la familia, donde la principal preocupación era un pequeño de 8 años, el hijo menor de Claudia.
La afectada, de profesión educadora de párvulos, falleció el miércoles recién pasado.
A comienzos de esta semana -por motivos que no fueron revelados a la prensa- ingresó con una intoxicación medicamentosa al hospital Claudio Vicuña. Debido a su crítico estado de salud fue derivada de urgencia al Carlos van Buren de Valparaíso.
Pese a los esfuerzos médicos por salvarle la vida, la madre sanantonina dejó de existir en el centro asistencial de la capital regional.
Tras el deceso, desde el Ministerio Público se solicitó que el cuerpo fuera sometido a una autopsia y por ello la familia de Claudia Fredes pasó incluso la Noche Buena en el Servicio Médico Legal de Valparaíso, a la espera de que les fuera entregado el cuerpo de su ser querido.
Funeral
Finalmente ayer comenzaron a velar a la joven madre en calle Contulmo y hoy se realizará su funeral.
La familia programó una misa para el mediodía de hoy en la capilla Santa Luisa de Marillac de Barrancas. Tras el sepelio se llevará cabo el funeral en el cementerio Parroquial de San Antonio.
La hija mayor de Claudia Fredes, Ana Castro, accedió a conversar con Diario El Líder en este duro momento que atraviesa y definió a su madre como una mujer alegre. "Siempre estaba dispuesta a ayudar a los demás. Era muy buena amiga, ayudaba a todos, a cualquiera que se lo pedía, era muy atenta", la recordó. J