Estética irrumpe en contienda municipal de San Antonio
Embellecer la ciudad y sacarle esa atmósfera sombría es para los detractores del actual alcalde Omar Vera (PRSD) uno de sus más serios desafíos. Él se perfila como el más fuerte sustentado en el 80% de adhesión que obtuvo el 2012.
El 2011 el puerto de San Antonio encabezó el ranking más lapidario. Fue declarada la ciudad con peor calidad de vida del país, según un estudio de la Universidad Católica con el apoyo de la Cámara Chilena de la Construcción.
El terminal que moviliza más carga en el país no tradujo positivamente ese hito a las estadísticas laborales. El INE reflejó una tasa de desocupación en el primer trimestre de ese año en 15,2%, superior al 11,5% de igual lapso de 2010, no superando entonces el 30% en el ICVU, Indicador de Calidad de Vida Urbana.
Cuatro años después son otras las condiciones, menos desastrosas. En el mismo estudio fecha 2015 San Antonio salió de los últimos lugares para ubicarse prácticamente en medio, puesto N°50 -en un universo de 93 comunas- con un 46,9% de ICVU. De la misma manera, el año pasado la tasa de desocupación fue de 6.3% en el primer trimestre. Un avance pero no suficiente.
El próximo alcalde tiene que hilar más fino y, además de la cesantía observar otros aspectos tales como el aumento de la drogadicción y la seguridad ciudadana.
En pocas palabras "que San Antonio deje de ser una ciudad fea", dice con elocuencia el concejal Jorge Jorquera (DC).
No obstante, Jorquera una vez más ve truncadas sus aspiraciones de competir por la alcaldía contra el radical Omar Vera que va tras su cuarto periodo. Ya el 2012 intentó ser candidato en forma independiente tras haber sido expulsado el 2007 de la DC acusado de faltar al reglamento interno. El Servel impugnó su intención porque aparecía como "candidato declarado como afiliado al partido político, pero no figura en el duplicado del respectivo registro general de afiliados, en el plazo legal", decía el oficio.
A pesar de que hace tres años fue reincorporado a la DC, Jorquera no tiene peso político para emprender esta aventura electoral; el falangismo no lo apoya y la Nueva Mayoría habría dado su bendición al actual alcalde para que continúe en carrera por el municipio.
"Omar Vera tiene una gestión sólida, logra hacer acuerdos en equipo y una votación consolidada, podemos tener diferencias pero en la DC tenemos el mayor respeto por el Partido Radical, lo vamos apoyar y ese es el planteamiento para las reuniones con la NM", argumenta Roy Crichton, presidente distrital de la DC y consejero regional. De paso aclara que la situación de Jorquera es compleja al tener el antecedente de haber sido expulsado de la colectividad. "Abogué por su reincorporación, fue un proceso traumático, entonces apoyar una candidatura en ese escenario, es difícil", apunta el core.
Rn declina
En tanto en la oposición se deslizó un posible nombre, el del concejal RN Danilo Rojas pero los esfuerzos del presidente de la tienda de Antonio Varas, Cristián Monckeberg, y del senador Francisco Chahuán por convencerlo fueron infructuosos. "Puse una sola condición, no competir con Omar Vera". Rojas a pesar de ser de Chile Vamos fundamenta su sentencia en lo que ve y escucha. Ya el 2008 hizo ese experimento y sus conclusiones fueron certeras. "Hablo con los vecinos, conozco a la gente, y sé cómo lo ha hecho el alcalde actual. Según eso, mis cálculos son que él nuevamente va a ser electo para el próximo periodo. Hay muchos que quieren ser candidatos pero de ahí a que se atrevan… no sé. Prefiero hacer otra concejalía, lo que no es malo para conocer más el municipio por dentro". Este escenario lo atribuye a la cercanía que Vera tiene con la gente porque es de los alcaldes de a pie y que interactúa con los vecinos, además de los programas y el trabajo interno del municipio junto con el gobierno regional y el central para el financiamiento de proyectos.
De hecho, el 2012 se creyó que Vera no se presentaría a la segunda reelección por temas de salud y que su opción era más bien un escaño en la Cámara de Diputados. Finalmente compitió en las municipales aumentando su votación de un 50% que obtuvo el 2008, al 80% (más de 20 mil sufragios.
Otro hito que marca su gestión es que la primera vez que postuló a la alcaldía de San Antonio, en el 2004, para competir con Lucía Menares (DC), ella perdió después de estar 8 años a la cabeza del municipio principalmente por la votación del llamado "bloque progresista" que se volcó en aquella oportunidad a favor de Omar Vera.
ÚNICO EN ESCENA
Entonces, hasta el momento, convertir a San Antonio en una ciudad bonita que logre desprenderse de esa atmósfera lúgubre, incluso sucia, que se ha apropiado de su imagen, es el gran reto para Omar Vera, y que no se quede solo en ser el puerto de Chile campeón en movimiento de carga.
Según han deslizado algunas fuentes cercanas al municipio, él mismo habría anunciado que este sí sería su último periodo como alcalde, así tampoco buscaría un cargo en el Congreso. El propio Vera aclara que siempre ha desistido aceptar ser candidato a diputado esencialmente porque es feliz en su rol de servicio a la comunidad. "Es más cercano y productivo, eso no significa que mañana o en el tiempo o en el análisis del contexto país eso (no) pueda variar", confesó escueto.
Claramente el concejal Rojas ve ahí las puertas para la eventual presentación de una candidatura a un cargo superior en un próximo periodo. Por ahora cree que el máximo desafío del alcalde que asuma el 2017 es seguir trabajando por engrandecer la comuna. "Hay muchos proyectos, entre ellos el Puerto a Gran Escala (PGE) y, por supuesto, seguir avanzando en estrategias para que los porcentajes de cesantía no se disparen".
Jorge Jorquera insiste en que le interesa ser candidato a alcalde, pero ante el poco respaldo DC no está dispuesto a enfrentar el costo financiero que implica una campaña. "Si bien la gente me tiene cariño, con eso no se ganan las elecciones, no están dadas las condiciones".
El 2004 fue elegido concejal con la primera mayoría. El 2008 no postuló al Concejo privilegiando la posibilidad de ir a la pelea por la alcaldía. El 2012 volvió a ganar con la primera mayoría.
Igual admite su molestia ante las declaraciones de Crichton en las que apoya a Omar Vera. "El presidente distrital aparece diciendo que lo respaldan sin haberlo discutido. Tengo entendido que existe una instrucción del partido diciendo que hay que apoyarlo pero no hemos visto nada escrito ni se ha conversado el asunto", precisa Jorquera, quien en su rol fiscalizador, 7 de junio de 2014, hizo una presentación a la Contraloría Regional de Valparaíso, solicitando un dictamen acerca de lo obrado por el municipio.
Este recurso fue resultado de un proceso que empezó el 20 de marzo de 2013 cuando la municipalidad, con la votación a favor de siete concejales y uno en contra, el de Jorquera, decidió entregarle al Club San Antonio Unido 35 millones de pesos mediante la minuta N° 4 de Subvenciones. Pero nadie lo escuchó.
El edil detractor de la medida esgrimió que no corresponde subvencionar a una Sociedad Anónima Deportiva. En total, fueron 70 millones de pesos, por eso el edil decidió recurrir al órgano contralor.
A mediados del año pasado la Contraloría emitió su dictamen en el que considera a San Antonio Unido como un club social y deportivo "sin fines de lucro", lo que no obsta para que, en sus conclusiones, el órgano del Estado le ordene al municipio abstenerse de aprobar recursos como los otorgados, lo que sería verificado en futuras auditorías, e instó a iniciar el pertinente procedimiento disciplinario.
"No es justo que el alcalde exponga así a sus funcionarios", reclama Jorquera para quien el municipio en su gestión debe ser más ejecutivo y revisar las prioridades. Él fue también uno de los grandes opositores al polémico mall Arauco, inaugurado el 2009.
"Finalmente, después de 9 años la Contraloría me dio la razón. Está mal construido y no cumple las normas", justifica el concejal.
Ciudad fea
Jorquera insiste en que una de las prioridades del alcalde debe ser embellecer la comuna. "En San Antonio no tenemos la libertad de mirar al mar, es una ciudad que está feísima porque no se le han puesto las ganas de embellecerla; para mí está sucia, se necesitan espacios verdes amigables donde jueguen los niños y la gente salga a pasear". Reclama además por los problemas en seguridad ciudadana y la falta de infraestructura en los colegios municipales.
Claramente el horizonte de Omar Vera es distinto al que plantea Jorquera. Y aunque sabe que la elección que viene se da en un escenario complejo por el descrédito de la política y los políticos, no pierde la esperanza de superar ese 80% de adhesión que alcanzó el 2012.
"La comunidad está desencantada de lo que es la gestión; no obstante en lo local el matiz es diferente. Entonces espero que la comunidad vaya a cumplir con su compromiso democrático, que vaya a votar y ejerza su derecho a elegir. Bajo ese contexto espero que no disminuya la afluencia de la comunidad, se mantenga o en lo posible se pueda acrecentar porque eso le da fuerza a la persona elegida", sostiene.
Vera está tranquilo. Sustenta esa calma en el impulso que le ha dado a la comuna. Entre sus desafíos para un próximo periodo está el PGE, obra principal que puede instalar a San Antonio en un sitial importante de proyección económica a nivel nacional.
"Hemos trabajado con responsabilidad y convicción en eso. Debemos seguir propiciando el desarrollo de la infraestructura portuaria para que no solo se beneficie la comuna, también la región y el país. Vamos a hacer los esfuerzos para que en el momento que corresponda el gobierno resuelva el desarrollo de esta gran infraestructura", precisa el alcalde.
Sin altibajos
Así, entonces, se urde el mapa electoral de esta comuna de 95 mil habitantes y un presupuesto anual que bordea los $14 mil millones; aparentemente un proceso que se llevará a cabo sin mayores altibajos, porque sin lugar a dudas, esta ciudad es una evidencia de que hoy la opinión pública, a la hora de elegir a sus autoridades más que por los partidos, vota por la persona.