Así operará la ley de inclusión en las escuelas de San Antonio
El jefe del Daem, Luis Salinas, pidió aplicar con criterio las nuevas normas escolares.
El próximo jueves 3 de marzo, 6.100 estudiantes de las escuelas y liceos municipales de San Antonio regresarán a clases después de casi tres meses de vacaciones.
Este año, el Ministerio de Educación puso en marcha la ley de inclusión, que se compone de una serie de normas enfocadas en que ningún alumno sea privado de asistir a clases por asuntos relativos a temas como su vestimenta, su condición sexual, el estado civil de sus padres y otras situaciones. La idea es que se respeten las convicciones religiosas, ideológicas y culturales de cada estudiante y quede en el olvido la selección.
Respecto a este tema, el jefe del Departamento de Administración de la Educación Municipal (Daem) de San Antonio, Luis Salinas, explicó que "la ley de inclusión que se tiene que asumir progresivamente", lo que, a su juicio, implica que parta con una marcha blanca.
Según Salinas, lo más importante es que las nuevas medidas se apliquen con "criterio", aunque recordó que el municipio local comenzó, hace dos años, a implementar un programa de convivencia escolar y de inclusión. "Todos los casos de convivencia, de procesos sumariales, de la no discriminación, los temas de género y de sexualidad, del trato con los migrantes, el manejo de conflicto con los apoderados y con las familias de estructuras monoparentales, los tenemos ya abordados", enfatizó sobre labor de la Unidad de Sicosocial de Convivencia Escolar y Comunicaciones, liderada por el profesional Alejandro Santis.
Apariencia
Luis Salinas destacó que la ley de inclusión "favorece la no discriminación" de los alumnos, por lo tanto el reglamente interno de cada establecimniento "debe dejar claras las condiciones de ingreso" y, a la vez, posea la dotación de profesores necesaria para atender a jóvenes con trastornos como el déficit atencional.
"Si el establecimiento va a tener alumnos que van a ingresar con el pelo largo o con piercing, tiene que tener especialistas que sepan orientar la convivencia con ese tipo de apariencia", afirmó el jefe del Daem.
"Lo que tenemos que garantizar siempre es que los reglamentos internos de cada escuela o liceo estén lo más actualizado para que no se den condiciones de discriminación o de arbitrariedad frente a lo que la misma ley impulsa en temas como la apariencia o la vestimenta", concluyó Luis Salinas, quien enfatizó que lo principal es que los profesores no se desgasten en asuntos ajenos a la preocupación de enseñar bien a los alumnos.
6.100 estudiantes del sistema municipal de San Antonio ingresarán a clases el 3 de marzo.