Crudo relato de mujer agredida por pareja celosa: "No hay que callarse"
Víctima llamó a denunciar hechos de violencia.
"Lo perdoné la primera vez que se portó mal conmigo. Ese fue mi gran error". Una mujer de San Antonio se atrevió a contar los difíciles momentos que sufrió a manos de un "mal amor".
La semana pasada la noticia sobre una joven colombiana que fue descuartizada por su pololo celópata la hizo reflexionar. "'Para allá mismo ibas tú', me dijo una amiga que vio la noticia. Y así hubiese sido", analizó.
Fue la historia del macabro homicidio la que hizo que esta mujer, que es madre y abuela, se decidiera a compartir su negra experiencia. "Lo hago para que ninguna mujer se quede callada, que no aguanten".
Su calvario comenzó por los celos. Relata que su ex pareja era obsesiva. "No quería que me juntara ni con mi familia. Fui a un matrimonio sola -porque él ya estaba en mala con mi familia y no lo podía llevar- y me decía 'te arreglai pa' hueones'. Me insultaba por haberme arreglado. Ese día me veía bien y eso lo hizo explotar".
En un dos por tres pasó de las groserías a los golpes. "Los celos lo volvieron loco", recuerda esta víctima de violencia intrafamiliar que solicita resguardar su identidad.
"Llegué a mi casa y no estaba mi ropa. El clóset estaba vacío. Había botado toda mi ropa en el antejardín. Me sentí tan humillada. Empezó a patear mi ropa hacia la calle. Me echó con ropa y todo", confiesa.
Aquel día no sólo arrojó su ropa afuera, sino que también le pegó. Eran cerca de las 4 de la mañana. "Me preguntó si me iba a ir de la casa y le dije que sí. Me respondió 'cómo te vas a ir…' y se dio media vuelta y me dio una cachetada al lado izquierdo. Y no quedó conforme. Le dije 'maricón' y ahí me pega al otro lado. Me reventó el labio, me dejó morado".
Tras la última escena de celos y violencia, puso una denuncia en Carabineros por los golpes y porque la amenazó de quemarla con un cigarrillo. Hoy el acusado no se puede acercar a ella.
"Todas las mujeres deben atreverse a denunciar y no perdonar. Ellos (los hombres agresores) no van a cambiar y las cosas pasan de los gritos a los insultos y luego a los golpes".
-¿Por qué cree que las mujeres que sufren agresiones no denuncian?
-Primero por miedo, pero es mejor enfrentar un hecho de inmediato antes de que siga creciendo. La segunda razón es porque es muy difícil tramitarlo. Cuando uno denuncia te mandan para uno y otro lado. Te ponen puras trabas. Soy yo la víctima, pero es a él al que tratan como un rey. En vez de abrir puertas te las cierran. Al final muchas mujeres dicen "ya, no importa, no sigo con esto (trámites)". Eso debe cambiar.