Un intento de golpe de Estado, cuyo resultado anoche aún estaba en desarrollo, ocurrió ayer en Turquía. La acción fue llevada a cabo por una facción de las Fuerzas Armadas turcas y fue denunciada, en primera instancia, por el primer ministro turco, Binali Yildirim.
A través de un comunicado leído en la televisión estatal TRT, la facción golpista intentó justificar su acción acusando la existencia de un "régimen autocrático" con un gran aumento del terrorismo en el último tiempo.
Mientras se escuchaban disparos afuera de los cuarteles castrenses, aviones de combate sobrevolaron la capital y vehículos bloquearon el tránsito en dos de los principales puentes de Estambul, lo que causó grandes atochamientos.
El primer ministro Binali Yildirim, habló de un "intento" de golpe, pero que no se había concretado. Minutos más tarde lo hizo el Presidente Tayyip Erdogan, quien llamó a la población a salir a las calles para protestar. Calificó el intento de golpe como algo que venía de "una facción minoritaria dentro de las Fuerzas Armadas", y prometió que daría una "necesaria respuesta".
En declaraciones a un reportero de la cadena CNN Turk vía celular, el Presidente agregó que el pueblo turco debe reunirse en plazas públicas para mostrar su respuesta al intento de golpe militar.
Erdogan dijo que cree que el intento de golpe terminará dentro de un "tiempo corto" y dijo que los responsables pagarán un alto precio en los tribunales.
Anoche ya se veía a varias personas en las calles de Ankara y estambul haciendo caso al llamado.
Parlamento atacado
La agencia rusa RIA Novosti informó anoche que tanques del Ejército golpista habrían rodeado y abierto fuego contra la sede del Parlamento en Ankara, poco después de que se registrara en la capital una fuerte explosión en torno a una estación de televisión estatal turca.
El hecho alertó al mundo. La alta representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior, Federica Mogherini, pidió "moderación y respeto a las instituciones democráticas". El canciller ruso, Serguéi Lavrov, llamó a evitar un derramamiento de sangre y a solucionar los problemas en el marco constitucional.