Mónica Jorquera Escobar.
Tiene 60 años y saldrá con 75 de prisión. Ayer un anciano recibió una severa sentencia por parte del Tribunal Oral en lo Penal debido al grave daño que le causó a una niña.
El sanantonino fue encontrado culpable la semana pasada de violar en varias ocasiones a una pequeña de sólo 9 años y, por ello, el martes pasado fue sentenciado a 15 años y un día de cárcel efectiva.
La abultada sentencia se debió a que el acusado también fue hallado culpable de abuso sexual en contra de la menor.
Los jueces establecieron que abusaba de ella cuando se ofrecía para bañarla, aprovechándose de la confianza que familiares depositaban en él, puesto que el condenado era la pareja de la abuela de la víctima.
Cuando los magistrados estimaron que el abuelastro fue el autor de los delitos de violación infantil y abuso sexual infantil, ambos reiterados, el fiscal a cargo del caso, Álvaro Mansilla, solicitó a la terna de jueces una condena de 20 años.
Pese a que no fue sentenciado a ese tiempo, la pena fue igualmente alta, siendo una de las más severas entregadas durante este año en tribunales de San Antonio.
Álvaro Mansilla explicó tras la lectura de la condena, que el victimario arriesgaba a pasar varios años tras las rejas porque no tenía ninguna atenuante que le ayudara a bajar su sentencia.
Por el contrario, el violador, cuya identidad y rostro no pueden ser revelados por orden del tribunal, sí tenía una agravante, pues registra antecedentes penales por lesiones en el contexto de violencia intrafamiliar.
Olvidar
La madre de la niña que sufrió los vejámenes a manos de su abuelastro dijo a Diario El Líder que quedó conforme con la condena de 15 años de cárcel para el acusado.
"Por mí que hubiese sido una cadena perpetua, pero dentro de los años que se le podían dar, están bien los 15. El hizo un gran daño a mi hija, que todavía se está recuperando de todo lo que este tipo le hizo", explicó Francisca, de quien se mantendrá su apellido bajo reserva para proteger la identidad de la niña afectada.
Además la mujer dijo que "ahora lo que tenemos que empezar a hacer es olvidar. Mi hija sigue con sicólogo y será un largo camino, pero tenemos que sanarnos".
Finalmente manifestó que "estoy agradecida por todo lo que nos ayudaron desde que denuncié lo que le ocurrió a mi hija. Agradezco al fiscal del caso (Álvaro Mansilla) por el apoyo y la preocupación. Yo no creía en la justicia, pero ahora hubo justicia para mi hija", culminó Francisca.
11 Años tiene hoy en día la niña que fue violentada sexualmente.