Los sanantoninos rompieron el chanchito para ayudar en la Teletón
Durante las 27 horas de amor se recibieron las donaciones para superar la meta de más de 30 mil millones de pesos.
Hace un año la pequeña Antonella Osorio (7) comenzó a juntar con mucho esfuerzo y dedicación cada moneda que recibía para donar el dinero en la Teletón 2016.
Luego de recolectar junto a sus padres todas las chauchas que encontró en el suelo y en sus bolsillos, rompió el chanchito y ayer al medio día, con una sonrisa de oreja a oreja, fue a dejar su aporte al Banco de Chile que está ubicado en el centro de San Antonio.
La alumna del Instituto Bicentenario Javiera Carrera Verdugo entró con la bolsa con monedas entre sus manos, para luego salir con el comprobante y el certificado que la señalaba como donadora.
"Este es el segundo año que hacemos esto. El primero recolectamos como 8 mil pesos y este año creo que serán un poco más de 10 mil", agregó Leonardo Osorio, padre de la niña.
A pesar que el monto ni se compara con las donaciones que realizan las grandes empresas, Antonella se sintió como la mejor de las heroínas, ya que con su aporte ayudará a los niños de la Teletón se rehabiliten y se construyan nuevos centros.
Ese es el vivo ejemplo de lo que se vivió en toda la comuna, en donde miles de niños motivaron a sus padres con la canción "levántate mamita" para dirigirse desde tempranito a depositar y ayudar en esta maratónica jornada que reúne a todos los chilenos.
Alejandro Olivares, jefe de gestión del Banco de Chile de Llolleo señaló que "durante la mañana hubo poca afluencia de público, pero estamos optimistas porque sabemos que superaremos el monto del año anterior. La gente está destinando mayores recursos para las donaciones".
Por otro lado, Gonzalo Pavez, jefe de gestión de la sucursal de San Antonio contó que "a las 11.15 horas llevamos 3.880.000 y el año pasado llevábamos 2.995.000. Vamos bien".
Pero para lograr este hermoso sueño, era necesario que todos los sanantoninos se pusieran la mano en el corazón y sacaran la billetera para realizar el depósito.
Pero como existen muchas formas de generar recursos Marisol Letelier, más conocida como "la mami del mote" puso manos a la obra desde muy temprano.
"Llevo 12 años que dedicó este día a trabajar por la Teletón porque uno de mis nietos tenía síndrome de Down y participo en su honor", reconoció.
Mientras Marisol sirve un exquisito vaso de la bebida típica chilena cuenta que ella también sufre una discapacidad, ya que para ella es imposible moverse sin la ayuda de algún amigo o familiar.
"No puedo caminar, tengo artrosis y artritis. Además soy operada de la columna y caderas. Tengo todo malo", indicó entre risas.
Pero a pesar de todos los males, Marisol llegó lo más temprano que pudo a la plaza de Llolleo para aportar este año con su granito de arena.
-¿Por qué decidió ayudar de esta forma a la Teletón?
-De repente se me ocurrió. Me dije a mí misma que si trabajaba todo el año para mí qué me costaba trabajar un día para los niños de la Teletón.
-¿Tener un familiar discapacitado le cambió el switch para ayudar en esta hermosa causa?
-De todas maneras. Antes uno no se metía en estas cosas, pero de pronto uno empieza a ver en la televisión o los hijos de los vecinos y va tomando conciencia. Además, al tener un niño enfermo uno siente empatía con las personas que están viviendo lo mismo.
-¿Cuánto donó el primer año que participó en la Teletón?
-La primera vez fueron como $2800 porque había muy poca gente. El año pasado hice como 28 mil.
-¿La pasa bien participando de la Teletón?
-Sí, porque nosotros debemos ayudar al prójimo. Por ejemplo, yo ayudaré a la Teletón hasta que me muera y después que pase eso, mis hijas seguirán con la tradición.
El abrazo de Chile
Durante las 27 horas de amor, los trabajadores del Banco de Chile debieron esforzarse para que todo saliera a la perfección
Milenko Jorquera (39) lleva trabajando 10 años como asistente de servicio en la sucursal ubicada en el centro de San Antonio y cada Teletón se le llena de emoción por la masiva participación.
"La experiencia es súper buena y muy motivadora. Participar como colaborador del banco en esta campaña solidaria nos llena el corazón porque a todos, especialmente los niños, les encanta acercarse a hacer sus donativos", indicó Milenko.
El trabajador se alegra con la llegada de los niños. "Ellos se emocionan y se contentan con participar. Eso nos motiva y por eso dejamos el cansancio a un lado", agrega con optimismo.
Hasta las 18.20 horas de ayer el cómputo en el Banco de Chile de Llolleo a era de $19.335.089 , tres millones más que en el 2015 en donde llevaban 15.338.776.
Por otro lado, la sucursal en San Antonio contó $32.898.191 a las 21.15 horas, un poco más de lo que alcanzaron el año pasado que era $32.350.380.
Finalmente, a nivel comunal se vivió una jornada solidaria gracias al apoyo de todos los sanantoninos que se emocionaron hasta las lágrimas con los testimonios de los niños y sus padres, que se pusieron en sus zapatos y depositaron a la cuenta 24. 500 - 03.