El deplorable estado del lugar más visitado del verano en San Antonio
La parte ubicada al costado norte del Paseo Bellamar es la zona olvidada del turismo sanantonino.
El sector comprendido entre el Mercado Esfuerzo y Trabajo y la playa de la caleta Pacheco Altamirano es uno de los más visitados durante el verano en San Antonio. Sin embargo, es evidente el deterioro que presenta y la imagen antiturística que proyecta.
No es nada nuevo mostrar lo que ocurre en este punto de la ciudad. Lo lamentable, según algunos sanantoninos, es comprobar que pasan los años y nada parece cambiar en el paisaje que, paradójicamente, ofrece una vista espectacular para apreciar las faenas del terminal portuario.
Quienes allí circulan habitualmente admiten que los principales problemas del lugar son la acumulación de agua sucia y pestilente en el piso, el pésimo estado del pavimento del paseo y las corroídas estructuras que daban forma a la antigua costanera. A eso se le suma la basura en el lecho del estero Arévalo que acaba en esa playa y la poca armonía que hay entre el actual Paseo Bellamar y este espacio tan poco agradable de nuestra comuna.
Luis Álvarez, quien vende cochayuyo y antigüedades en el sector, confirma que existen pocas razones para sentirse orgulloso de lo que allí pasa. "Aquí falta un arreglo general, porque aquí se ha caído mucha gente ya que hay muchos hoyos en el piso. No les cuesta nada gastar un par de monedas y echar un poquito de cemento para emparejar y que pase la gente en sillas de ruedas; hay dos personas que se han caído en este mismo sector. Si tenemos así, el turista se va", analiza el popular comerciante conocido como "El Rey del Cochayuyo".
El sanantonino Rigoberto Bravo también tiene su visión sobre el tema. "La pasada es fea, la autoridad no le da mucha bola a esto. Eso es lo primero que dice el turista que viene para acá", admite al mirar lo que es la primera parte de pavimento ubicado al costado norte de las remozadas instalaciones del Paseo Bellamar.
Para Jéssica Silva, una comerciante que trabaja en dicha área, lo importante es que allí se genera trabajo para quienes viven en San Antonio. Pese a ello, reconoce que hay que mejorar el estado del pavimento.
Teresa Avendaño, comerciante del Mercado Esfuerzo y Trabajo, opina que el municipio debe reparar el pavimento, pues ha habido varios casos de personas que se han caído por esta razón.
Siguiendo más al norte está el grupo de locales de venta de mariscos y pescados cuyos dueños, trabajadores y clientes deben convivir con el agua pestilente acumulada en el suelo.
"Hay que arreglar el piso para que pueda cambiar el entorno que está horrible. Siempre nos dicen que van a arreglar y no pasa nada", asegura Tamara Martínez, propietaria del puesto número 7. Ella añade que los mismos locatarios no pueden solucionar esta situación sin la ayuda de las autoridades.
Caída
Frente a la playa de la caleta Pacheco Altamirano, muy cerca de la estatua de San Pedro, algunos comerciantes se ubican, especialmente en verano, para vender artesanías y ropa usada.
Fue en ese punto donde, el lunes, la artesana Rommy Schneider y su hijo cayeron después de afirmarse en una lata que reemplaza a la ya inexistente baranda de la antigua costanera.
Josselyn Vargas, dirigenta del Sindicato de Trabajadores Independientes que se dedica al comercio en esa zona, declara que "llevo ocho años trabajando acá en la caleta y esto siempre ha sido igual; es tierra de nadie".
Vargas cree que urge que las autoridades intervengan en este espacio para reparar la baranda o al menos poner un letrero que advierta del peligro de apoyarse sobre esa estructura. Según ella, el principal escollo para que este sector mejore es que nadie vela por su cuidado y mantención.
Sobre la caída registrada el lunes en la costanera, Josselyn Vargas asevera que "fue un accidente grave, pero podía haber sido una muerte porque nuestra compañera se cayó por sostener a su hijo, se golpeó la cabeza y ahora está sin trabajar".
Tanto como estas personas que, prácticamente, viven en la zona aledaña a la caleta, los visitantes de otras zonas coinciden en la necesidad que alguien hago algo por un sector que atrae miles de turistas al año.