La instructora de zumba que lucha contra una desconocida enfermedad
Rodee Correa se ha realizado diversos exámenes y hasta ahora no sabe qué tiene. Hoy habrá una lota en su beneficio.
De un momento a otro la vida se le puso cuesta arriba a Rodee Correa Núñez (36).
Todo comenzó con una pequeña molestia en uno de sus pies. A los pocos días ya tenía problemas en ambas piernas y en cosa de semanas, los dolores y la fatiga se fueron apoderando de su cuerpo, aunque asegura que, a raíz de una repentina baja de peso, se dio cuenta que algo no andaba bien.
"En noviembre comencé a sentir fatiga. Todos los días despertaba cansada y con poco apetito. Tenía náuseas y a veces no alcanzaba ni a tomar agua porque la vomitaba", cuenta Rodee.
Su ánimo fue decayendo al igual que su peso y tras acudir a la consulta de su sicólogo, éste decidió derivarla de urgencia al hospital Claudio Vicuña. "Estaba muy débil. Por medio de la clínica enviaron un papel para que el hospital me recibiera y desde el miércoles de la semana pasada estoy internada".
Reconoce que desde que llegó al recinto asistencial, se ha sentido mucho mejor de ánimo, pero la incertidumbre de no contar con un diagnóstico certero la llena de angustia.
-¿Aún no tienes un diagnóstico?
-No, todavía no me encuentran nada y eso que me han hecho miles de exámenes, pero hasta ahora no hay nada.
Trabajo
Rodee es instructora de zumba y profesora de danza de la escuela San José de Calasanz, pero debido a su delicado estado de salud, tuvo que dejar de lado sus obligaciones y dedicarse de lleno a su recuperación.
"Tuve que arrendar mi casa e irme a vivir con mis papás y mis tres hijas. Con lo que recibo he podido hacerme cargo de mis gastos. También hice dos beneficios que me sirvieron sólo para costearme los exámenes que me realicé en Santiago, pero hasta ahora no se sabe qué tengo".
Según lo que le han explicado los médicos que la están evaluando, todavía le quedan varios días de hospitalización, ya que los resultados de algunos exámenes que deben practicarle se demoran varios días.
"El sicólogo dice que por todos los síntomas que tengo podría tratarse del Síndrome de Addison (una deficiencia hormonal que genera languidez y debilidad general), así que ahora están tratando de descartar eso", afirma.
Estos días no han sido fáciles para Rodee. Estar alejada de sus hijas y de su familia la bajonean un poco, aunque confía en que pronto volverá a retomar su vida.
"Estoy aburrida de estar acá, pero al final es lo único que me está haciendo sentir bien porque ya me veo un poco más compuesta. Bajé 22 kilos en dos meses. Primero estaba en los 55 kilos y a las semanas ya estaba en 46", confiesa.
Afortunadamente esta joven madre no está sola en esta batalla. Desde que comenzó su lucha por salir adelante, la comparsa 30 de Marzo, a la cual pertenece, ha estado apoyándola en todo. Es por eso que hoy, a las 20 horas, en la sede de la cancha de la población, se llevará a cabo una lota a beneficio de Rodee, quien además es la coreógrafa de la comparsa.
"Los chiquillos de la comparsa se han portado un siete conmigo por eso estoy muy agradecida", sostiene.