La experiencia de la capitana de un remolcador
Pamela Mella Alvarez tiene 37 años. Estudió ingeniería naval en la Universidad Austral y luego aprobó los cursos ante Directemar para transformarse en tercer piloto de la Marina Mercante.
En lo laboral se ha desempeñado como capitana de la draga Ernesto Pinto, en Valdivia. Actualmente es capitana del remolcador Tagua, de Transportes Fluvial Corral, donde inició esta labor en marzo de 2016. Hoy ya es segunda piloto de la Marina Mercante.
"En un principio fue un desafío asumir este trabajo, porque son puros hombres los que trabajan en esto, de hecho en mi carrera universitaria ya eran solo hombres. Pero tengo un carácter fuerte y una mujer que no lo tenga no puede ser capitana de un barco", contó Pamela.
Soltera y junto a su hija Constanza, de 5 años, Pamela ha sabido aprovechar las oportunidades que se forjó en la vida. Se las arregla para cumplir con sus deberes de madre pese a que tiene que cumplir turnos de 20 días de trabajo y 10 días de descanso.
Aclaró que por ser mujer nunca ha esperado un trato especial en el desarrollo de su trabajo. "No porque yo sea mujer voy a tener algunas ventajas por sobre mis colegas, yo a bordo soy un hombre más no una niña a la que hay que cuidar, si tengo que amarrar una espía lo voy a hacer", ratificó.
"Estamos orgullosos de tener a una de las pocas mujeres capitán y oficial de un remolcador chileno. Cuando conocimos a Pamela pudimos comprobar su trayectoria y capacidad de liderazgo, que ha quedado demostrado en estos meses al mando del RAM Tagua. Pamela ha sido un gran aporte", dijo el gerente general de Portuaria Corral, Diego Sprenger.