En el puerto decomisaron parches chinos con supuestas propiedades terapéuticas
Personal de Aduanas incautó 24 mil unidades que llegaron de contrabando a San Antonio.
Un cuantioso contrabando de mercancías que podrían dañar la salud de las personas interceptaron fiscalizadores del Servicio Nacional de Aduanas tras realizar un acucioso análisis de diversos indicadores de riesgo a un embarque proveniente de China.
Este procedimiento se efectuó en el puerto de San Antonio, donde dentro de un contenedor se descubrieron 24 mil unidades de parches chinos para la piel que tendrían supuestas propiedades terapéuticas y que venían como contrabando, porque estas mercancías tampoco habían sido declaradas por el importador.
Prohibidos
El ingreso y la comercialización de este tipo de mercancías están prohibidos en Chile, porque no se encuentran autorizados como productos farmacéuticos de uso humano.
El no tener registro sanitario implica que no ha sido demostrada la calidad, seguridad y eficacia de su uso.
El administrador de la Aduana de San Antonio, Pablo Zambrano, destacó el rol de protección hacia los ciudadanos que se cumple con este tipo de decomisos. "Logramos evitar que circularan miles de parches, cuyo origen y composición son desconocidos, y que podrían causar serios perjuicios a la salud de las personas", indicó.
"Para lograr estos decomisos es clave la labor de inteligencia y análisis que se desarrolla en todas las Aduanas del país, lo que nos permite realizar procesos de selectividad mucho más efectivos y focalizados", informó Zambrano.
El decomiso de los 24 mil parches chinos para la piel se dio en el marco del Programa Integrado de Fiscalización (PIF) de Salud Pública de Aduanas, que busca controlar con mayor eficiencia las mercancías que presentan riesgos para la salud de las personas, entre ellas productos que estén sujetos a certificaciones, autorizaciones, registros o prohibiciones por parte organismos públicos, como el Instituto de Salud Pública (ISP) o Ministerio de Salud.
Ahora las muestras de estos parches serán analizadas por el Laboratorio Químico de Aduanas, para verificar de qué están hechos y qué contienen, además de enviar otras unidades al ISP con el mismo objetivo.