En la Playa Grande de Cartagena terminó terrorífico secuestro a un chofer de Uber
Víctima de 21 años denunció que fue liberado luego de que sus familiares pagaran un rescate.
Era la una de la madrugada de ayer cuando en la Playa Grande de Cartagena no andaba un alma. Fue en medio de la noche cuando un joven alteró esa calma. Agitado, se acercó hasta una unos carabineros para pedir socorro.
El veinteañero, identificado como Yerko, relató a los uniformados que era conductor de Uber, que había sido víctima de un secuestro y que sus captores acababan de liberarlo frente a la playa.
Los funcionarios policiales siguieron los pasos del denunciante y así encontraron abandonado el vehículo en el cual lo habían secuestrado. El auto estaba sin bencina en la calle Bellavista, al llegar a la Playa Grande.
¿Qué había pasado antes? El afectado relató a la policía que llegó hasta Cartagena luego de sufrir un terrorífico asalto con secuestro y que incluso sus familiares habían pagado un rescate para que lo liberaran.
Según información que fue recababa por efectivos de la Segunda Comisaría de Carabineros de Cartagena, la víctima fue atacada mientras se desempeñaba como chofer de la empresa Uber, la cual presta servicios de transporte en vehículos pertenecientes a los propios conductores y que funciona a través de una aplicación para celulares.
Eran cerca de las 19 horas del sábado pasado cuando el conductor y estudiante universitario salió a hacer "unas carreras" en el auto de su padre, un Nissan Sentra blanco. Entonces lo asaltaron en la Región Metropolitana.
Asalto
Cuando Yerko conducía por la comuna de Lo Espejo fue abordado por cuatro sujetos que se bajaron de una camioneta de color negro. Los antisociales lo rodearon y dos de ellos lo apuntaron con armas de fuego.
Uno de los hampones se subió al Nissan y le colocó un revólver en el estómago, mientras le decía que siguiera manejando. De esa manera, marcharon por dicha comuna escoltados por la camioneta negra.
Intimidándolo, el copilo-asaltante que llevaba el rostro cubierto con un pasamontañas, hizo que Yerko condujera hasta salir de Santiago. Llegaron a la Ruta 78 y lo obligó a manejar hacia San Antonio.
El mismo parte policial indica que los asaltantes tomaron diversos resguardos, puesto que obligaron al conductor a pasar solo por el peaje de Melipilla, mientras lo escoltaban. En la caseta, el veinteañero pidió socorro a la cajera, pero la solicitud no dio resultados.
Apenas cruzó el peaje, los sujetos lo abordaron nuevamente a punta de pistola y lo obligaron a conducir hasta que llegaron a Cartagena, cerca de las medianoche del sábado.
Rescate
Mientras Yerko conducía durante casi 5 horas, desde el mismo celular de la víctima los malhechores se contactaron con familiares de éste, a quienes les exigieron pagar un rescate.
El trato consistía en que depositaran 400 mil pesos en la Cuenta Rut de Yerko, puesto que lo obligarían a ir a un cajero automático a girar el dinero.
El tío del afectado relató que los sujetos lo contactaron a través del perfil de Facebook de su sobrino y luego de que le entregaran datos personales del veinteañero, supo que no se trataba de un "cuento del tío".
Los delincuentes escribieron a través de Messenger de Facebook que "creen que esta wea es juego, ya nos movemos con él (daban vueltas en el vehículo), lo dejaremos cuando esté la plata en la cuenta. Mientras más se demoren, peor para él".
Desesperada, la familia del universitario reunió el dinero e hicieron un depósito a la cuenta de la víctima. Así lo relató a los policías.
Desde Carabineros informaron que una vez hecha la transferencia, los hampones trasladaron a Yerko hasta el cajero del Banco Estado, ubicado en la Plaza de Armas de Cartagena, resguardándose de no ser vistos por las cámaras de seguridad.
El joven sólo pudo girar 100 mil pesos, los que entregó a los captores junto a $30 mil que tenía de la recaudación como chofer de Uber. Tras ello, lo hicieron manejar hasta la Playa Grande, donde el auto quedó en panne de bencina y donde finalmente lo abandonaron.
Funcionarios de la Sección de Investigación Policial (SIP) de Carabineros de Cartagena se encuentran realizando una serie de diligencias que apuntan a encontrar a los autores del secuestro y para ello, entre otras pericias, levantaron huellas dactilares desde el vehículo.
Hasta el cierre de esta edición aún no se conocía el paradero de los peligrosos asaltantes.
400 mil pesos le exigieron a familiares del conductor que depositaran para el rescate.