Carolina Bustos Muñoz
Su corazón ya le había avisado que algo no andaba bien, por eso cuando el comerciante sanantonino Gustavo Pérez Carvallo, de 72 años, sufrió un segundo infarto hace unas semanas, la preocupación se apoderó de sus seres queridos y sus amigos.
Tras permanecer internado en el hospital Claudio Vicuña, fue dado de alta. Todo iba bien con respecto a su recuperación, pero la tarde del miércoles, mientras se preparaba para atender su local Santa Ana en calle Pedro Montt, un infarto fulminante le arrebató la vida para siempre.
"Él estaba bien. Se estaba recuperando y de a poco estaba retomando sus quehaceres, pero al final su corazón no pudo más", dijo, con mucha tristeza, su hija Carla, quien durante la jornada de ayer recibió innumerables muestras de cariño.
La noticia sobre su deceso causó un profundo impacto entre quienes lo conocían, principalmente porque este comerciante sanantonino era muy querido.
"Ha llegado mucha gente a despedirlo. Yo sabía que Gustavo era muy querido, pero jamás me imaginé que tanto", comentó su mujer Rosa Trigo, quien agregó que "él era un hombre muy bueno en todos los aspectos y eso ha quedado demostrado en todo el cariño que hemos recibido desde que se supo sobre su muerte".
Historia
Antes de dedicarse al comercio, este fanático del club Universidad Católica, perteneció a la Fuerza Aérea, pero una lesión lo obligó a retirarse.
"Cuando mi abuela se enfermó, mi papá se hizo cargo del bar y de la residencial, y de ahí en adelante jamás dejó su trabajo. Él era muy feliz conversando con sus clientes, los mismos que hoy no pueden creer su muerte", contó Carla.
Rafael Letelier, presidente de la Cámara de Comercio de San Antonio, se mostró muy triste con el deceso de Pérez, principalmente "porque siempre participó activamente en la cámara donde él fue uno de los socios fundadores. Incluso hace unos meses participó en una reunión en la gobernación, ya que estaba muy preocupado de la seguridad y de embellecer el centro comercial".
"Él siempre estuvo muy preocupado de mejorar el comercio, en especial el de Pedro Montt. Su muerte realmente ha sido un tremenda pérdida para todos nosotros", reconoció el timonel de los comerciantes locales.
Los restos de este querido sanantonino fueron velados en su local en calle Pedro Montt.
Hoy, a las 13 horas, se oficiará una misa en la parroquia de San Antonio para posteriormente trasladar sus restos hasta el cementerio Parque del Mar, en Concón, donde será cremado tal como él lo había pedido a sus familiares.
"Él estaba bien. Se estaba recuperando y de a poco estaba retomando sus quehaceres, pero al final su corazón no pudo más".
Carla Pérez Trigo, hija"