Con globos al cielo dieron el adiós a familia fallecida
Ayer fue el funeral de Benjamín Hernández (10), de su mamá Edith Paillacán y de su abuelo Juan Paillacán.
Una de las mayores tragedias ocurridas este año en San Antonio tuvo ayer su último capítulo, pues se llevó a cabo el funeral de la familia que falleció en un incendio ocurrido el martes pasado en la 30 de Marzo.
Decenas de ramos de flores adornaban ayer la sede social de la citada población, donde los vecinos lloraron amargamente por la partida del pequeño Benjamín Ignacio Hernández Paillacán (10), de su madre Edith Ximena Paillacán Cheuquemán (36) y de su abuelo, Juan Paillacán Mellado (78), quienes fallecieron juntos luego de que se quemara la casa donde residían.
Tras una breve ceremonia que se llevó a cabo en la sede del "Monumental" de la 30 de Marzo, las tres pompas fúnebres marcharon hacia el colegio San José de Calasanz, donde Benjamín era alumno del cuarto básico. En el lugar sus compañeros lo esperaban para rendirle un homenaje y despedirlo para siempre.
Con pañuelos blancos y aplausos recibieron el cuerpo del pequeño en la puerta del establecimiento que se ubica en calle Las Palmeras, a solo una cuadra del lugar donde ocurrió la tragedia.
"Es algo que no vamos a olvidar, yo soy apoderada del colegio y nos dolió a todos en el alma", manifestó Carolina.
Más tarde, en el cementerio Parque Mirador de Bellavista, se realizó el funeral, donde con globos blancos lanzados al cielo despidieron por última vez a la familia Paillacán, en medido de desgarradoras escenas de pesar.