El cambio climático y la migración
por Felipe Tobar-Risi, ambientalista.
El cambio climático corresponde a una variación del clima, podría ser natural, pero esta idea tiene importancia hoy, pues se ha comprobado por la mayoría de la ciencia, que esto se debe principalmente a la actividad humana, que ha fomentado y acelerado los factores del cambio.
No todas las personas migran a otros países con la intención de obtener una mejor situación económica, sino que muchos vienen en condición no oficial de refugiado.
Para "aterrizar" esta idea, tan ajena a la mayoría de los hogares y de la conversación familiar de sobremesa, sepamos que existen personas que deben autoexiliarse debido a que las condiciones del clima ya no ofrecen la natural estabilidad del ecosistema para garantizar la vida. El dolor que significa dejar tus raíces a causa de un cambio de este tipo, es realmente sacado de una película sobre tribus nómadas o una apocalíptica.
Los inmigrantes, por lo general, provienen de países con un bajo índice de resiliencia, esto significa que no son lo suficientemente fuertes para "levantarse" de un desastre natural, ya sea porque no están preparados, no cuentan con planes de emergencia, manejo de riesgos y desastres, y esto sencillamente porque antes no habían tornados, ni aluviones, lluvias torrenciales o granizo, entre otras manifestaciones de la naturaleza; ¿cómo estar preparado para algo jamás visto? Eso es lo que está pasando en algunas regiones del mundo.
Declaraciones de inmigrantes indican que hoy hay escasez de agua potable, de cultivo terrestre, de frutos en los árboles y de peces; y cómo no, si el agua dulce se contamina con la salada por la subida del mar al derretirse el casquete polar, el cultivo no crece porque el suelo se degrada por falta de agua para riego y aumento de la temperatura, los frutos de los árboles no crecen porque los fuertes vientos se llevan la flor de primavera y los peces han migrado por la subida de la temperatura del agua. Los peces migran al igual que los humanos.
El clima es sostén del ciclo natural que preserva la vida en el planeta, de alterarse violentamente no hay planificación que resista; es como un semáforo que cambia de verde a rojo sin pasar por amarillo.
Es una necesidad el involucrarse en la discusión ambiental, si queremos preservar nuestra calidad de vida, el clima cambia y usted cambia con él. Vivir en modo sustentable es cambiar la arquitectura del pensamiento, es vivir un presente en armonía, es una revolución interna que construye un legado.