Mónica Jorquera Escobar
Jóvenes misioneros de una pastoral universitaria de Santiago se encuentran desde el 2 de enero pasado realizando distintas actividades en el cerro El Carmen y en Bellavista. Todo marchaba excelente hasta que unos sujetos atacaron al sacerdote a cargo de las actividades.
Era la tarde del domingo pasado cuando el padre alemán Hubert Reinan, quien es capellán de la pastoral de la Universidad Finis Terrae, se encontraba en una de las calles del cerro El Carmen terminando las actividades misioneras cuando fue abordado por un sujeto.
El joven, al que el cura percibió drogado y con alcohol, se le acercó sin dejarlo continuar su camino.
"Yo le conversé bromeando con él, en buen plan, le hablé intentado tener buena onda, ayudarle. Me dice '¿Qué tienes ahí?', mostrándome el celular que tenía en mi bolsillo (de la camisa)", relató en perfecto español el sacerdote alemán.
En ese momento el individuo se le acercó y con fuerza le dio un lanzazo al religioso, sacándole el celular desde el bolsillo de su clásica camisa negra de sacerdote.
"Salió corriendo con mi celular. Yo lo seguí corriendo, pero me dio un tirón y no pude seguir. Gracias a Dios no pude, porque si lo alcanzo la que le esperaba", aseguró sin perder el sentido del humor.
Perdón
El padre Reinan dijo que lamenta lo que ocurrió, pero que perdona al joven que le robó su teléfono.
"Tengo el celular en alemán porque pensaba que si me lo robaban al menos iba a fastidiarlos. Si este niño, que le dicen Carlitos, por ser (estar) drogado y borracho no logra usarlo porque además está en alemán, pues que venga conmigo y le enseño a usarlo", manifestó el sacerdote que dijo que imaginaba al ladrón intentando traducir su móvil.
Sobre la labor social que realizan en cerro El Carmen y Bellavista el padre dijo que esto no los desalienta en llevar a cabo las actividades con los jóvenes de la pastoral.
Manifestó que afortunadamente el sujeto no le hizo daño al momento de robar el teléfono.
"Mi primera reacción, la humana, es estar enojado, pero luego Jesús nos pide perdonar a quien nos hace daño y la verdad, le perdono. Le daría un abrazo de perdón y hasta le regalaría el celular", dijo Hubert Reinan.
Agregó que "en primer momento da rabia que te roben, pero yo perdí un celular, frente a que los papás de él están perdiendo a un hijo, un hijo que quizás no valió la pena criar, eso me da tristeza", analizó el cura que se mantendrá en la zona hasta el 12 de este mes.