Apuñaló a su víctima con un cuchillo cocinero para robarle el celular
Autor del ataque con arma blanca fue detenido por Carabineros y ayer lo dejaron en prisión.
Cubierto de sangre y como pudo llegó hasta su casa un hombre que fue ferozmente asaltado en las cercanías de su vivienda la madrugada de ayer.
La víctima escapó hasta su residencia para desde ahí llamar a los carabineros, a quienes les relató que lo acababan de apuñalar para robarle su teléfono celular.
De inmediato se activó un operativo policial, acudiendo al sitio del suceso una patrulla de carabineros, cuyos funcionarios socorrieron al afectado, quien sangraba profusamente desde dos heridas cortopunzantes que le había propinado su agresor, una en el brazo y otra en el muslo izquierdo.
Cuando los carabineros trasladaban al herido hasta un centro asistencial, la propia víctima vio al autor del ataque, puesto que el individuo se encontraba en la misma esquina donde ocurrió el asalto, en calle Orella con 30 de Marzo, en la población del mismo nombre.
Según consta en el parte policial, los uniformados actuaron con rapidez, deteniendo al sujeto. Al revisarlo encontraron en su bolsillo el celular del afectado, el cuchillo cocinero con el cual lo atacó y un revólver.
En la audiencia de formalización de cargos en contra del imputado, realizada ayer en el Juzgado de Garantía de San Antonio, se reveló que la víctima declaró en Carabineros que cuando eran las 3 de la madrugada de ayer un hombre de baja estatura se le acercó, apuntándole con un arma de fuego.
Además, aportó a la policía que pudo reducir a su asaltante, pero éste lo atacó enterrándole un cuchillo en dos oportunidades, logrando así robarle su teléfono móvil.
El detenido, Marco C.M. (37), cuenta con un amplio prontuario policial por varios delitos, por los cuales existen en su contra tres condenas por robo con intimidación.
Contando con todos los antecedentes, ayer la jueza Leticia Morales decidió dejar al imputado en prisión preventiva por ser su libertad un peligro para la sociedad, y subrayó que "el arma utilizada no sólo se traduce en la intimidación, sino que en las heridas que provoca".
El sujeto guardó silencio durante la audiencia y estará privado de libertad por los 60 días en que se fijó el plazo para la investigación.
La víctima se encontraba ayer fuera de riesgo vital, ya que las lesiones que sufrió no afectaron ningún órgano.