Escuela virtual permite que sus alumnos estudien sin moverse de sus casas
Centro educativo de Isla Negra fue reconocido con un premio internacional durante dos años consecutivos.
Los tiempos han cambiado. El internet ha provocado una verdadera revolución en distintos ámbitos. Y uno de ellos es la educación. Hoy existe la posibilidad de que los niños ni siquiera tengan que salir de sus casas para recibir educación formal. En esta era virtual, el colegio puede llegar a los hogares a través de las pantallas de los dispositivos electrónicos.
El sistema de educación en línea nació en Estados Unidos. El economista Rodrigo Pérez lo trajo a Chile en 2007 y fundó el primer colegio virtual del país: Think Academy, cuyas oficinas están en Isla Negra, comuna de El Quisco.
Trabajan con un software educacional y con profesores de diferentes partes de Chile, quienes reciben una instrucción especial para utilizar este sistema virtual. Las clases son grabadas, pero hay tutores disponibles todos los días entre las 9 y las 14 horas en un chat interno.
Se basan en los contenidos del Ministerio de Educación y los alumnos dan exámenes libres para validar sus estudios. Cada región tiene una dirección provincial de educación que designa una escuela pública donde los estudiantes rinden sus exámenes para pasar de curso.
Inglés
Además de los contenidos obligatorios, desde kínder se les enseña inglés y tratan de incorporar material innovador. El próximo año implementarán un software 3D para Ciencias Naturales.
El colegio tiene un costo cercano a los 70 mil pesos mensuales, pero cuentan con becas que están detalladas en el su sitio web.
Más tiempo libre
"Este método educativo es tan válido como cualquier otro. Rodrigo lo pensó para ayudar en casos en que la enfermedad o hospitalización limitara el desplazamiento de los niños a la escuela, porque él padece esclerosis múltiple. En los últimos años ha aumentado el interés porque con la metodología los estudiantes tienen tiempo para realizar diferentes actividades en las tardes. Las clases son entre las 9.00 y las 13.30 horas", explica la directora académica, Viviana Morgado.
Al tener más tiempo libre, se espera que los estudiantes puedan realizar en paralelo a la escuela otras actividades, donde se encuentren con sus pares, ya que la principal crítica que recibe este método es la falta de socialización durante el proceso educativo.
"Es una alternativa para padres que tienen que salir por trabajo de Chile durante algún período y no quieren que su hijo estudie en las escuelas del país que los recibe. En esos casos, ellos pueden rendir los exámenes libres en el consulado y cuando regresan, reintegrarse al sistema convencional si así lo quieren. También es una opción útil para los deportistas de alto rendimiento. Hay unas chicas que practican surf y que cursan la escuela virtual porque deben vivir algunos años en Brasil por su entrenamiento", agrega Morgado.
De kínder a 4° medio
Sin embrago, no sólo hay alumnos temporales, también hay chicos que comenzaron en kínder y que hoy están en 4to básico.
Desde el 2010 ya han egresado varias generaciones de estudiantes. Oscar Morales, quien estudio 3° y 4° medio, afirma que "logré un desarrollo íntegro. Más allá del conocimiento que puede entregar una sala de clases, aprendí a relacionarme con mi entorno, pude dedicar tiempo a disciplinas como el taekwondo, tenis y otras actividades sociales, que se ven restringidas en los métodos convencionales, ya que los jóvenes de esa edad prácticamente viven en el colegio de lunes a viernes".
Morales agrega que "los contenidos ofrecidos por Think Academy en cada asignatura son profundos, motivan a los estudiantes a descubrir más; no es una aprendizaje motivado por una evaluación".
Sin fronteras
"Queremos crear pensadores que puedan utilizar la tecnología que existe, priorizar el pensamiento crítico y el razonamiento lógico", con esas palabras Rodrigo Pérez, agradeció en París el premio internacional BID Quality Award 2017. Este año volvieron a ser galardonados por la institución con el premio platino por compromiso, innovación y excelencia, el que recibirán el 17 de marzo en Frankfort, Estados Unidos.
Fueron distinguidos también por innovación y calidad en Ucrania. Desde el 2015 en ese país tienen una plataforma que prepara en los contenidos equivalentes a la PSU.
9 mil becados
También en el 2015, Think Academy alcanzó notoriedad en Chile. Después del aluvión en el norte, el colegio becó a 9 mil niños de la región de Atacama, los que durante tres meses asistieron a las clases virtuales a la espera de que se levantaran sus nuevas escuelas.
Se piensan extender a otras regiones de Sudamérica, ya hay avances en Colombia, y se visualiza implementar la metodología en Perú y México.
Físicamente las oficinas de la escuela están en Isla Negra, en Av. Central, allí se realizan reuniones con los apoderados.
70 mil pesos vale la mensualidad de la escuela virtual, aunque también dan becas.