"Yo, lavo autos"
Javier Zúñiga Eyzaguirre se define como un "professional carwash" y se promociona como tal en las redes sociales. "Aprendí con esta pega a dejar el pudor de lado", comenta.
"Al principio me daba vergüenza... Es que después de haber estudiado durante años y verme lavando autos en la calle es difícil, pero aprendí con esta pega a dejar el pudor de lado".
Javier Zúñiga Eyzaguirre (36) es un lavador de autos profesional o como él se define, un "professional carwash". Su propuesta es ir al domicilio del cliente y ofrecer el mejor servicio y con elementos de buena calidad.
Y para hacerlo se promociona en la página de Facebook "Javier LavAutos" y a través de tarjetas y volantes que él mismo se encarga de entregar por diversos lugares de San Antonio.
Maestro tornero y horquillero, Javier comenta que estudió para hacer bien su trabajo, pero por diversas circunstancias quedó sin empleo por lo que debió arreglárselas lo mejor que pudo.
De poco le sirvieron las veces que fue a entrevistas y entregar su currículo para opciones de empleo, porque asegura que tras el "después te llamo" nunca más recibió un llamado.
"¿Qué podía hacer? ¿quedarme de brazos cruzados? Ahí agradezco que mi amigo Javier Chávez me haya ayudado y me involucré de a poco en este asunto y no me ha ido mal. Da para darse vueltas", dice mientras aplica shampoo especial a un vehículo de uno de sus clientes.
"¿Pero sabe? Eso no fue lo más difícil", confiesa.
-¿Qué fue lo más complicado para ti?
-Lo peor es la vergüenza. Que te vean lavando autos en la calle es difícil. Ahora uno pierde el pudor y se acostumbra porque esto es un trabajo.
-¿Qué tal ha sido la respuesta de tus clientes?
-Buena, me ha ido bien porque es una opción para aquellos dueños de vehículos que no tienen tiempo para lavar el auto. Y fíjese que un automóvil limpio dice mucho de la persona. Por ejemplo, ahí hay un auto muy sucio por fuera, pero ¿cómo estará por dentro?
-¿Qué tipo de clientes tienes?
-De todo, pero muchas dueñas de auto. Es que son mamás y entre sus trabajos, el cuidado de los niños y las cosas de la casa, no les queda tiempo para lavar el auto. Y bueno, para eso estoy yo.
-En San Antonio hay muchas personas que se dedican a lavar autos ¿por qué tú marcas la diferencia?
-Voy donde me llamen desde Santo Domingo hasta San Antonio. Si es muy lejos hay un pequeño recargo en el servicio. Hago un lavado completo que implica la limpieza de la maletera, silicona en los tableros, aromarizador, lavado externo, cera, brillo, entre puertas y renovador de neumáticos. Me demoro como una hora. Me dedico a los detalles y no tengo nada contra los que lavan en la calle, pero yo aplico materiales de calidad que he ido adquiriendo y aprendiendo a utilizar con la experiencia. Además que los mismos clientes te van enseñando y te dicen a qué cosa debes ponerle atención.
-¿Y deja dinero esta pega?
-Sí, sirve. No llueve, pero gotea. Ahora sería mejor tener un local, pero así como estoy no me ha ido mal. Me ha dado de comer, he comprado mis cosas y máquinas para limpiar tapices y alfombras a domicilio. Mi sueño es tener un local propio donde ofrecer un mejor servicio junto a mi hermano y mi amigo Javier Chávez.