Mónica Jorquera Escobar
Los vecinos de Llolleo Alto están alarmados luego de una serie de ataques donde las víctimas han sido inocentes perritos del sector.
El último episodio lo catalogaron como el más grave y violento de todos. Residentes de calle Los Halcones con Rafael de la Presa encontraron un can descuartizado. Desconocidos no sólo le dieron muerte, sino que además le cercenaron partes de su cuerpo.
"No tenía una pata, se la habían cortado y le faltaba la mitad de la cabeza. Eso no fue un accidente, fue un daño que le hicieron directamente", analizó Fresia Huerta, quien halló el cadáver del animal junto a la acera de calle Rafael de la Presa.
El hallazgo la impactó tanto a ella como a otros vecinos, quienes no daban crédito a tal grado de crueldad. "Era un perrito pequeño, así como tipo cocker spaniel pero no de raza (era quiltro). Era negro y tenía su colita. Si pertenecía a alguna persona no lo sabrán porque estaba irreconocible", dijo la mujer que se declara animalista.
Al descuartizamiento del animal le sumaron otros daños igual de crueles, pues el cuerpo, relataron testigos, daba cuenta de que fue quemado con agua. "Tenía partes del cuerpo sin pelo, eso pasa cuando le echan agua hirviendo", expresó Huerta.
El cadáver del perrito maltratado fue recogido por Fresia y su marido. "Lo sacamos de ahí porque era impactante para cualquier niño".
Envenenados
Este estremecedor hecho se suma a otro que ocurrió en el mismo sector de Llolleo Alto, donde en abril pasado envenenaron a seis perros en una misma noche.
Los antecedentes fueron puestos en manos de Carabineros, sin que se hallara a los responsables.
En el caso del descuartizamiento, vecinos dijeron que se comunicaron con Carabineros, pero que estos no acudieron al lugar a tiempo, pues ya habían retirado el cadáver.
Ahora los residentes de dichas calles piden que las autoridades colaboren en investigar los casos ocurridos.
"Queremos que se sepa quién está detrás de estos hechos, porque son (los desconocidos autores) un peligro para todos", dijo una vecina del barrio.
6 perros fueron envenenaron en Llolleo Alto en abril pasado.