El judo está de fiesta en Las Cruces
350 deportistas participan en el Zonal Centro de la federación que se realiza en el Polideportivo del balneario.
El Polideportivo de Las Cruces se transformó en el epicentro del judo en la zona central del país este fin de semana. Entre el club Natsumi, la municipalidad y la federación de la disciplina organizan en el recinto deportivo del balneario la justa que reúne a los mejores de este arte marcial.
Trescientos cincuenta deportistas de las regiones de Coquimbo, Metropolitana, de Valparaíso, del Libertador Bernardo O'Higgins y del Maule se congregan en el gimnasio crucino para competir hasta hoy en la segunda edición del campeonato tabino.
Con su galería llena y en tres tatamis ayer arrancó la justa, que representó un desafío mayor para el club local. El interés por participar en este torneo federativo creció en un alto porcentaje. El año pasado llegaron 270 competidores, ahora sobrepasaron los 300.
"Es mucho trabajo recibir a las delegaciones, los alojamientos, la implementación. Trabajamos una semana de forma fuerte y se sigue dos días después. La organización está buena y nos dicen que está muy bonito el campeonato", aseveró el sensei del club Natsumi, Jaime Carreño, quien es cinturón negro y primer dan.
La presidente de la institución organizadora, Anne Vivanco, agregó que "es un desafío grande hacer este campeonato acá. El judo no es un deporte conocido, pero ya llevamos tres años trabajando en la comuna y tenemos alrededor de 40 alumnos entre niños, juveniles, y adultos", precisó la dirigenta, quien además es la mujer del sensei y tiene a sus tres hijos (Joao, Jimmy e Ivette) en el club.
Competir en casa para los tabinos es un aliciente, pues acostumbran a recorrer varias ciudades del país. El mes pasado fueron a Valdivia a un Nacional y para julio agendaron la participación en un campeonato en Paihuano, en el corazón del Valle del Elqui.
"Es bueno competir en casa, porque nos ahorramos plata y como la gente viene para acá, podemos entrenar más y competir también", aseguró Joao Carreño (15 años), hijo del sensei, quien es seleccionado nacional y esta temporada subió a la categoría menos 50 kilos.
En estos tres años de entrenamiento entre El Tabo y Las Cruces, donde el sensei Carreño también desarrolla un taller, el judo aumenta en adeptos y obtiene resultados que reflejan "el buen trabajo que hacemos", como destacó el entrenador.
"Tenemos a varios de nuestros deportistas compitiendo a nivel provincial, regional y nacional. Están los casos de Joao Carreño, Elisa Caro y Tomás Caro, quienes compiten en distintos torneos y con buenos resultados", precisó el maestro, quien espera que su pupilos demuestren en casa todo lo aprendido en este tiempo de arduos entrenamientos en los talleres y el club.