"Barrio Bravo": el libro récord que se forjó en el Litoral Central
Con más de 25 mil copias vendidas en un año, "Barrio Bravo: ¿Por qué amamos la pelota?" se convirtió en el libro de fútbol más leído en la historia de la literatura chilena. Roberto Meléndez, su autor, escribió todas sus historias en Algarrobo.
Roberto Meléndez Bustamante, a sus 33 años, es un escritor que marcó un hecho histórico en cuanto a la literatura deportiva en el país. Su primer libro, "Barrio Bravo: ¿Por qué amamos la pelota?", publicado el año pasado por la editorial multinacional Penguin Random House, se convirtió en un rotundo éxito, superando las 25 mil unidades vendidas y consiguiendo siete ediciones impresas de más de 3 mil ejemplares cada una.
Estas cifras lo posicionan por amplio margen como el libro de fútbol más vendido en Chile, imponiéndose por más de la mitad de copias vendidas a sus escoltas.
Las historias futboleras de Roberto Meléndez fueron creciendo más allá de la lectura de adultos, como era en un principio el propósito del autor. En varios colegios del país, incluido algunos de la provincia, "Barrio Bravo" está presente en sus bibliotecas o es lectura recomendada por los mismos profesores.
"Eso ha sido increíble, emocionante, realmente un orgullo. Cuando escribí Barrio Bravo nunca pensé que sería tanto el impacto que ha tenido. Pero he sabido que en los colegios la recepción ha sido buena y me parece fantástico que los profesores se estén atreviendo a eso. Este libro finalmente no es solamente para los peloteros. Fue enganchando por las historias, por la forma que tengo de escribir y finalmente Barrio Bravo se convirtió en un espacio mucho más amplio", reconoce el escritor, quien espera durante el 2020 lanzar un libro con cuentos infantiles.
Desde algarrobo
Lo que quizás pocos en el Litoral Central saben, es que este fenómeno llamado Barrio Bravo tienen sus bases instaladas en la comuna de Algarrobo, donde Roberto Meléndez llegó a vivir hace tres años justamente para dejarlo todo en la cancha por su gran proyecto.
Se mudó desde Santiago hacia la casa que su madre tiene en calle Los Tilos, y a comienzos del 2015 empezó a escribir las historias que pronto serían furor en Facebook, red social en donde Barrio Bravo actualmente cuenta con 160 mil seguidores (en Instagram suma otros 30 mil) y lecturas que son vistas por usuarios de varias partes del mundo.
"Gran parte del éxito que se ha ido formando tiene que ver mucho con la tranquilidad de estar viviviendo en Algarrobo. Acá venía de chico, pasábamos las vacaciones en la casa de mi madre y siempre estuve conectado a esta zona. Los primeros besos, las primeras borracheras y las primeras pichangas salieron durante esos veranos", detalla entre risas Roberto, quien tras estudiar Derecho y ejercer muy poco la profesión, quiso darle auge a su pasión por la escritura.
"Al venirme a Algarrobo ya no sentía la presión de mi familia o de los amigos sobre tener un trabajo que me rentabilizara, porque Barrio Bravo no tuvo ninguna ganancia durante los primeros dos años. Era una apuesta en la que tenía que estar solo, tranquilo", asegura.
El gran paso
"Siempre había querido venirme a Algarrobo y ponerme a escribir, y entre uno de esos temas estaba Barrio Bravo. Pero también escribía de todo cuando más chico: de existencialismo, estructuras más románticas e incluso policiales. Cuando estuve en Derecho, por el tema de tanto estudio, dejé de escribir por un buen tiempo, ya que la carrera absorbe harto. Pero cuando ya estaba llegando a los 30 años, era el momento de decidir, y quería ponerme a escribir, que era lo que soñaba hacer desde los 15 años", detalla.
Fue ahí que decidió que el fútbol sería su fuente de inspiración para comenzar a soltar la pluma. "Soy futbolero total, de ir desde chico al estadio, de jugar a la pelota y, como la gran mayoría de los niños, cuando era más pequeño casi lo único que me importaba era el fútbol. Yo estudiaba algo de Biología y al rato no me acordaba mucho, pero sí sabía de memoria la formación de los equipos, a qué minuto fue el gol de algún partido o quién había sido expulsado", afirma, agregando que además "tenía buena memoria y creo que interpretaba bien el fútbol".
Como hincha
Roberto Meléndez comenzó poco a poco a analizar el posible escenario donde quería desenvolverse y sacó una conclusión: "identifique que acá en Chile existía una ausencia de cómo se expresaba el hincha en el fútbol. Las crónicas siempre son muy sobrias, donde abunda el dato, por lo que veía que no tenían mucha pasión y no estaba identificada la presencia del hincha ni tampoco la cabeza del jugador", cuenta Meléndez, quien, eso sí, cree que "esos datos más formales tienen que existir porque le dan rigurosidad al análisis del fútbol".
Pero lo que quería era darle un toque más literario al balompié y encauzar un nuevo estilo de crónicas que saliera del molde tradicional. "Era algo más humano respecto al fútbol, donde lo villano y el heroísmo colindaran. Tenía las referencias de las crónicas argentinas, había leído a Soriano y Fontanarrosa, pero nunca la idea fue copiar algo. Lo mío era tratar de desarrollar un proyecto en las redes sociales que incentivara el gusto por leer y que con el tiempo alguien me identificara y quizás pudiera escribir en alguna revista importante. Esa era una de mis pretensiones", recuerda.
Barrio bravo
Lo primero que en 2011 fue un blog que bautizó como Barrio Bravo en el contexto de la Copa América que se realizaría en Argentina. "Por eso nace este nombre. Identificar el barrio sudamericano como un barrio bravo. Pero esa idea quedó ahí, hasta que el 2015 dije 'ya me voy a Algarrobo y me la juego con todo'. Y fue cuando resurgió el sitio de Barrio Bravo".
Fue justamente el 2015, en el marco de la Copa América que se desarrolló en Chile, cuando un texto en el Facebook de Barrio Bravo se viralizó de forma espontánea e instantánea a lo largo de los celulares y computadores de los futboleros.
"Se viralizó el texto 'Chau Uruguay', después de que la selección le ganara a Uruguay en cuartos de final en Copa América, y ahí se produce el quiebre de la situación. De 170 seguidores, de los cuales 90 eran amigos, pasé rápidamente a tener más de 500. Me di cuenta que por ahí había una oportunidad, así que tenía que seguir trabajando y sacándome la cresta", recuerda.
El boom explotó en marzo de 2016, cuando gracias a una crónica inspirada en el jugador italiano Francesco Totti, bautizada "Un Romántico", subió de 3 mil a 10 mil seguidores en Facebook, de los cuales 2 mil eran extranjeros. Y todo se consolidó en octubre del 2016, cuando una historia protagonizada por el "Guatón Nelson" caló hondo en todos los lectores de Barrio Bravo.
"En ese tiempo tenía 40 mil seguidores, lo que se dio de una manera muy orgánica, sin pagar nada por algún tipo de publicidad. Eran 40 mil personas que realmente querían leer las historias. De hecho, después de la historia de Totti fue cuando comenzaron a acercarse las editoriales para ver la posibilidad de un libro. Tuve ofrecimiento de todas las editoriales que funcionan en el país, pero finalmente elegí Random House porque era la mejor", reconoce Meléndez, quien hace pocos días escribió un artículo sobre el volante francés N'Golo Kanté que fue leído por más de 180 mil usuarios de Facebook.
-¿Cómo ha tomado el mundo del fútbol el sitio Barrio Bravo?
-Es un sitio que los jugadores quieren harto, porque ven que es un espacio que no los ve simplemente como el consumo del éxito y que también hay recuerdos, salir un poco de lo atemporal, por lo que hemos sido bien recibidos y eso me alegra, porque entrega un grado de legitimidad.
-¿De qué forma surge la posibilidad de hacer un libro?
-En el camino fui puliendo la mano y me di cuenta que podía hacer un libro, ya que las publicaciones comenzaron a tomar nota de autor y empecé a tener una voz como red social y como página. Primero las editoriales más pequeñas me ofrecían algo que no era acorde a mi ambición, porque mi intención era hacer un libro que marcara tendencia y que además me ayudara a vivir de esto, entonces no podía ser una publicación de mil libros, tenía que ser algo más allá de eso. Y Random House me ofreció empezar con 3 mil unidades.
-¿En las redes sociales le pedían que hiciera el libro?
-El proyecto de este primer libro se hizo bien desde las bases, porque los lectores querían que se materializara el libro y por eso que finalmente tuvo el éxito que tiene. Lo lanzamos en junio del año pasado y se convirtió en el libro de fútbol más vendido por lejos en Chile. Y ahora para el Mundial sacamos el segundo libro, que se llama 'Barrio Bravo Mundial', el que ya tiene más de 6 mil unidades vendidas.
-¿Qué se viene para Barrio Bravo como nuevo proyecto?
-Voy a escribir un libro para España, una selección con las dos primeras publicaciones, y unas cinco o seis historias españolas para entrar metiendo un gol. Allá iré a un sello que se llama Roca, que es el mejor de Random House para Iberoamérica, y soy el primer chileno en llegar ahí. Es algo impresionante, porque todo ha sucedido en muy poco tiempo.
Cariños a "chupete"
Hace unas semanas, Roberto Meléndez fue al mall de San Antonio, y en un stand de venta de libros una persona estaba hojeando un ejemplar de "Barrio Bravo".
"Justo iba pasando y lo estaban comprando, y pensé 'se lo firmó', pero después dije 'quizás va a pensar que estoy haciéndole una broma', así que preferí quedarme callado. Tenemos hartos seguidores del Litoral Central, de todas las comunas, y tienen que saber que el libro y todas las publicaciones han nacido de acá mismo", dice orgulloso el joven escritor que incluso se inscribió en el equipo amateur de Carlos Condell de Algarrobo, para no perder su costumbre de jugar como delantero.
"Estaba al tanto de la carrera que tiene Humberto Suazo acá en San Antonio. Su figura fue clave en la página Barrio Bravo, porque cuando escribí sobre él, de inmediato me empezaron a seguir cerca de 8 mil mexicanos, la mayoría de Monterrey, donde es un ídolo y el más querido. Así que le mando muchas gracias", comenta Roberto Meléndez Bustamante, el escritor que con su pluma y pasión le dio otra mirada al fútbol gracias a Barrio Bravo.