El artista boliviano que plasma la cosmovisión mapuche en su obra
Horacio Montes de Oca presentará lienzos con dibujos y pinturas al pastel seco y graso sobre figura humana, desde este jueves en el Centro Cultural San Antonio.
Horacio Montes es egresado de la carrera de Artes Plásticas de la Universidad Mayor de San Andrés de la Paz. A partir de su llegada a San Antonio en el 2015, se ha dedicado a trabajar la interculturalidad desde la ruka de Llolleo en conjunto con las agrupaciones indígenas que allí convergen.
Este jueves, a las 19 horas, inaugurará su primera exposición en Chile, la que resultó ganadora de la última convocatoria de los premios Ficsa.
La muestra permanecerá abierta en el Centro Cultural San Antonio hasta el próximo 24 de agosto, e incluirá visitas guiadas y microtalleres de dibujo para niños y jóvenes de la comuna.
-¿Considera que el arte puede ser un motor para la transformación?
-El artista puede darle sentido a su obra para que sea el medio para compartir su mensaje. Lo comprendo como medio para comunicar a través de un lenguaje trascendental, ya que comunica de formas subjetivas, a través de los colores y las formas. Se han abierto nuevas disciplinas. Estamos volviendo a conocimientos ancestrales que tienen que ver con el espíritu y un mensaje universal del arte.
-¿En qué sentido su obra tiene una propuesta intercultural?
-Desde la organización Calaucán es donde yo puedo realizar acciones que promuevan la interculturalidad. Es importante mantener mi identidad y compartirla con el entorno. En la ruka realizamos ese trabajo. Comparto ese saber del norte, con los pueblos del sur, y me inspiro en ese diálogo y lo plasmo. Lo bello del arte es que nos permite una influencia entre culturas y pueblos, nos une.
-¿Cómo ha sido su experiencia como inmigrante en San Antonio?
-Me he sentido muy bien acogido, me han abierto las puertas en el ámbito profesional. Por ejemplo, he sido valorado como artista en el Centro Cultural. En el entorno urbano, se está revalorando el saber ancestral, destacando mucho los valores, el cambio de actitud positivo que promueve. El arte nos puede unir como pueblos. Como inmigrante me siento afortunado que personas de diferentes nacionalidades tengan la oportunidad de exponer en el Centro Cultural.
-¿Cómo se vincula con el saber ancestral de Bolivia?
-En Bolivia se vive el mundo mágico constantemente. En las universidades hay bastante movimiento cultural. Se realizan conversatorios, talleres, seminarios, y en diferentes carreras se imparten materias que entregan el saber ancestral. En historia del arte, por ejemplo, se incluye bastante historia del arte de los pueblos originarios que tenemos allá. De modo que rescatamos su iconografía y se recontextualiza como arte contemporáneo. En Bolivia hay cierta empatía de forma natural con el saber originario, y acá siento empatía por los pueblos originarios de Chile. Me inspiro de la cosmovisión, formas y temáticas mapuche.
-¿Por qué decide incluir talleres en la exposición?
-Para socializar el arte, abrir puentes para que llegue a otros espacios, para que los niños visiten la galería y así despertar la vocación artística en algunos. En los talleres vamos a relacionar el arte con la cosmovisión de los pueblos originarios. Invitaremos gente de las organizaciones de San Antonio para compartir la temática de la exposición.
-¿Te quedarás en Chile?
-El amor me trajo aquí. Yo me quiero realizar acá, trabajando en cultura y en arte. Tengo mi familia en San Antonio, mi compañera y mi hijo son chilenos. El futuro dirá el rumbo que tomaré, pero por ahora estoy construyendo acá.