El ritmo de la batucada que sigue sonando fuerte en el Litoral Central
Casi dos décadas lleva la batucada "Arasta" desde que comenzó a hacerse conocida en El Tabo. Liderada por Ricardo Navarro, desde el 2016 que funciona como parte de un taller municipal que cuenta con 40 alumnos.
Los vecinos más antiguos del sector costero de la comuna de El Tabo no entendían por qué un pequeño grupo de jóvenes hacían sonar unos tambores y otros instrumentos de percusión durante un largo rato.
Eran comienzos del 2000 y el fenómeno de las batucadas en el país recién estaba en pañales. Por eso que a muchos tabinos les sorprendió el fuerte ruido de este ritmo brasilero y no tuvieron mejor idea que denunciar estos hechos a Carabineros.
"Las primeras veces que empezamos a juntarnos para ensayar en la playa en El Tabo algunos vecinos se enojaron con los ruidos y llamaron a Carabineros, e incluso salimos en el Diario El Líder. Pero era porque las batucadas eran algo muy nuevo, que poco se conocían, entonces esta desinformación hacía que pasaran este tipo de malentendidos", hace memoria Ricardo Navarro, quien junto a un grupo de amigos fueron los pioneros en formar una batucada en El Tabo.
"Éramos cinco los que comenzamos con estos ritmo en el año 1999. Teníamos todos entre 13 y 15 años de edad. En la radio las primeras canciones que recuerdo con este estilo eran 'Matador' de los Fabulosos Cadillacs, o algunas de Los Piojos, y así fue como empezamos a escuchar esta música. También escuchábamos el casette del grupo brasilero Olodum", recuerda Ricardo, agregando entre risas que "los primeros instrumentos que tuvimos fueron bien artesanales, ya que utilizábamos unos tarros de basura para hacer los ritmos en el sector de la terraza de El Tabo".
A cartagena
Los amigos tabinos siguieron estudiando su enseñanza media en el Liceo de Cartagena, instancia donde tuvieron la posibilidad de conocer a los integrantes de la batucada "Alua Rufa", que ya tenían un recorrido dentro del Litoral Central.
"Con ellos aprendimos mucho, ya que nos enseñaron más ritmos y teníamos hartas horas de ensayo. Compartimos una grata experiencia que nos sirvió para reafirmar lo que queríamos seguir desarrollando", asegura Ricardo Navarro.
Con más conocimiento y sumando muchas horas de ensayo, los amigos tabinos decidieron dar el paso más importante: formar una batucada con todas las de la ley.
"En el año 2002 creamos la batucada 'Arasta', nombre que se debe a unas siglas que vimos una vez en un casette. Junto a mis compañeros estuvimos trabajando durante los veranos como garzones y, una vez que juntamos el dinero, nos compramos los instrumentos: un repique, una caja y tres surdos de percusión, que son los cinco elementos básicos y principales para armar una batucada", detalla Navarro.
Por el litoral
La batucada tabina "Arasta" empezó poco a poco a hacerse conocida a lo largo del Litoral Central y las presentaciones en vivo comenzaron a llegar de forma inmediata.
"En esos momentos el grupo ya lo conformaban 12 integrantes, teníamos más instrumentos y nos empezaron a llamar de varios lados. Tocamos en un año nuevo en la Disco Show, en la discoteca Aquelarre, viajamos a Valparaíso a los Mil Tambores, en Santiago en la Universidad Santo Tomás, y en los veranos lo pasábamos muy bien porque estábamos con tocatas en la playa, y eso nos llevó a recorrer El Quisco, El Tabo, Cartagena, y varios puntos de la provincia", explica el líder de la agrupación.
Pese a toda la notoriedad y proyecciones que estaba consiguiendo la batucada "Arasta", durante el 2008 varios de sus integrantes ingresaron a estudiar diferentes carreras, provocando un paréntesis en el grupo musical que brillaba con los ritmos brasileros.
Ricardo Navarro, por ejemplo, estudió primero Ingeniería Eléctrica y luego se cambió a Gastronomía, donde se tituló como chef profesional. Fue justamente una oferta laboral en este rubro la que volvió a acercarlo con la comuna de El Tabo, ya que aceptó trabajar en el restaurante Puerto Castilla de ese balneario.
"Mientras estudiaba en Santiago pude hacer un taller de batucada durante el 2012 y 2013 en un colegio de Maipú. Pero este proyecto que se me presentó en el Puerto Castilla me hizo volver a mi comuna y así fue como pude desarrollarme en la cocina. Pero también pude animar un programa en una radio comunal, estuve ayudando en la construcción y varias cosas antes de que se comenzará a armar de nuevo la posibilidad de revivir el grupo de batucada", cuenta Navarro.
De vuelta al ritmo
Fue en 2014 cuando el largo paréntesis de "Arasta" llegó a su fin. "Comenzamos a retomar los ensayos y a darle vida nuevamente a la batucada. En lo personal quise dar un giro en lo que estaba haciendo en gastronomía y me enfoqué en la música. La batucada fue la puerta de ingreso a todo lo que es la música, y después pude aprender cajón peruano, yembe y otros instrumentos de percusión", explica el tabino.
Con la batucada "Arasta" funcionando nuevamente por el borde costero de El Tabo, en 2016 la agrupación comienza a ser parte de un taller gratuito municipal que en estos momentos cuenta con más de 40 alumnos de diferentes edades.
"Las clases son los martes y jueves en la terraza de El Tabo. Tenemos alumnos desde los 13 hasta los 35 años, aunque también algunos más chicos que tienen las aptitudes y las ganas de aprender los ritmos de la batucada. Y lo mejor es que los mismos alumnos quisieron que se siguiera llamando 'Arasta', así que lo tomamos como un orgullo, porque hay respeto por la trayectoria que ha tenido el grupo a lo largo de los años", reconoce Navarro, quien actualmente, a sus 32 años (20 de mayo de 1986), trabaja como encargado del Programa de Juventud de la Municipalidad de El Tabo.
La nueva formación de "Arasta" ha tenido la posibilidad de participar en eventos masivos como Quiscopelooza, la Marcha de los Derechos de los Niños en El Quisco, el Pasacalle que organizó el Senda en Valparaíso, el Día del Deportes en El Quisco y el próximo mes serán parte del carnaval "Mil Tambores" en Valparaíso.
-¿Estás contento con el giro que diste desde la gastronomía a la música?
-Claro que sí, porque la música ha estado conmigo desde chico. Antes de empezar con la batucada cantaba hiphop, grababa pistas y estaba siempre siguiendo todo lo que era música.
-¿Y la experiencia con este taller municipal gratuito de batucadas qué te ha parecido?
-Para mí en lo personal ha sido algo súper enriquecedor, ya que he podido desarrollar el trabajo en grupo, la pedagogía en algunos casos y también me ha ayudado mucho para involucrarme en la comunidad de El Tabo. Y lo mejor es que es un taller integral, ya que contamos con alumnos que tienen tipos de abandono y carencias a las que hemos podido ir prestando apoyo para que los chicos se sientan acompañados.