Mónica Jorquera Escobar
Hasta el ministro del Interior se refirió al hecho. Andrés Chadwick escribió en su cuenta de Twitter: "Recuperándose detective Morales. Asaltado junto a su pareja por grupo de delincuentes armados. En su defensa obligado a usar su arma. Lamentablemente herido y tres menores asaltantes fallecieron".
La autoridad se refería al caso del subcomisario Ernesto Morales, de la Brigada de Robos (Biro) de San Antonio, quien repelió un portonazo, dando muerte a sus tres asaltantes.
El hecho ocurrió poco antes de la medianoche del viernes en Recoleta, Región Metropolitana, cuando llegaba a la casa de su pareja. Entonces dos vehículos lo interceptaron, desde los cuales bajaron tres encapuchados que iban armados.
"Es abordado e intimidado con armas de fuego con intenciones de sustraerle el vehículo. (Morales) repele el ataque con su arma de servicio, hiriendo a los tres sujetos (…) Actúa debido a que estaba en peligro su vida", informó el oficial de servicio metropolitano, capitán de Carabineros Carlos Osses.
En medio del atraco, el subcomisario Morales fue herido por un disparo en la espalda, por lo cual fue trasladado al Hospital de Carabineros.
El jefe de la Biro de San Antonio, Eduardo Díaz, se trasladó de inmediato hasta la Región Metropolitana para conocer los hechos y el estado de salud del miembro de su brigada.
Ernesto Morales se mantenía hasta el cierre de esta edición internado en el centro hospitalario con lesiones que no fueron catalogadas de gravedad.
Heridos
Al momento del asalto los tres menores de edad fueron impactados por el arma de fuego del detective que se encontraba de civil.
Dos de ellos quedaron tendidos en el mismo sitio del suceso y un tercero, según indagó Carabineros, fue trasladado por un cuarto individuo al hospital San José, donde falleció.
Los occisos son dos adolescentes de 16 años y uno de 17.
Aún se indaga la identidad de la presunta cuarta persona involucrada en el portonazo.
Ayer el hecho fue catalogado como un actuar en legítima defensa por parte del miembro de la Biro local.
16 y 17 años tenían los menores que resultaron muertos tras atacar al detective.