David Muñoz Castillo
Paciencia. Eso es lo que derrocha Ítalo Galdames (50). Cualquiera habría abandonado en el camino, presa de la frustración. Él no, insistió y como reza el dicho "el que la sigue, la consigue", porque después de 40 años de carrera en el fútbol amateur sanantonino, el portero del club Norteamérica por fin logró su primer título.
Fue este fin de semana con los superseniors de la escuadra placillana, en la última fecha del Oficial de la Asociación de Fútbol San Antonio. Con un triunfo sobre Pedro Aguirre Cerda por 6 a 0, el arquero consiguió su primer título en una larga y reconocida carrera.
El resultado de la última jornada es solo un antecedente. Este cetro fue el resultado "de dos años de trabajo. Nos planteamos el año pasado tratar de salir campeones y armamos un equipo. Se dio todo y salimos campeones", explicó el meta de los azules.
El año pasado terminaron segundos en la competencia y por una resta de puntos dejaron escapar el título. "Un cabro jugó con el carné vencido, nadie se dio cuenta y nos quitaron los puntos".
Este año fueron por la revancha y el equipo capitaneado por Ítalo Galdames necesitaba un empate en la jornada final para conseguir el objetivo propuesto. Con el triunfo llegaron a 48 puntos y conservaron los tres puntos sobre García Huidobro.
"Algunos jugadores estaban nerviosos. A mí me dolía un poco la guata porque era la primera vez que iba a salir campeón", recordó el cancerbero placillano.
Primera corona
Ítalo Galdames tiene paciencia y también es fiel. En 40 años defendió una sola camiseta en su carrera deportiva, la azul del Norteamérica.
"El club otras veces salió campeón, pero yo nunca había sido campeón. Jugué en los infantiles, los juveniles, la primera adulta, en seniors y ahora en superseniors y nunca pude. Una vez salió la segunda, pero no jugaba en esa serie. No le achuntaba nunca", bromeó sobre las cuatro décadas de sequía de títulos.
Recordó que antes, cuando solo existía una asociación en San Antonio su institución logró el título de la general en el ascenso, pero como los títulos estaban vedados para Ítalo, por un motivo que no recuerda, justo la última fecha no pudo jugar.
Este domingo rompió esa falta de celebraciones en su carrera, que comenzó cuando tenía apenas 10 años.
Placillano de nacimiento, su amor por la camiseta del "Norte" es más fuerte que muchas de las ofertas que recibió en su trayectoria. "Nunca he pensado en irme, aunque me lo ofrecieron, nunca me interesó, me gusta jugar en confianza, con los amigos", reconoció sobre el carácter familiar que tiene la institución, que cuenta con la familia Carrasco como el principal pilar para mantener a un club que el próximo año cumplirá 100 años.
"Ellos son los mandamases del club y gracias a ellos sobrevive", reconoció sobre el rol de esta tradicional familia placillana.
Y aunque el "Norte" es calificado como el "patito feo" del barrio, comparándolo con Cóndor y el Unión Placilla, Ítalo recuerda que cuando estaban en la misma asociación "a los dos les iba mal con nosotros. En el último año mandamos al Cóndor al descenso, se salvaron porque se fueron a la asociación nueva", relató.
La campaña
Obtener un título y más en un campeonato largo de 22 fechas no es un hecho circunstancial.
Levantar la copa es fruto de esfuerzo, trabajo, dedicación y planificación.
Esos son los factores que Ítalo Galdames destaca de esta primera corona en su carrera.
"Formamos un grupo muy bueno. Eso se lo planteé a los chiquillos del equipo. Lo pasábamos muy bien, pero no ganábamos. El año antepasado sacamos tres puntos solamente. Un día nos juntamos y les dije a los cabros que iba a buscar unos amigos para pelear el campeonato", contó sobre el punto de inflexión que tuvo la escuadra.
Aguantaron la temporada 2017, Ítalo movió a sus contactos en el fútbol local y armó una columna vertebral para su elenco superseniors. "Con los que teníamos acá armamos un equipos más o menos, nos faltaba un acoplamiento, que se da con los partidos. Igual peleamos el campeonato. Quedamos con la bala pasada, picaditos", contó este vendedor de pescado en el local La Foquita del mercado.
A comienzos de este año se juntaron y se comprometieron a seguir. "Trajimos dos o tres refuerzos. Partimos bien, solo perdimos dos partidos con San Antonio Atlético, que fue nuestra bestia negra este año", detalló sobre la campaña.
Con Juan Carlos "Paletó" Letelier, el "Cabezón" Andrés Torres y otros jugadores más armaron un equipo de "buen pie", como define Ítalo Galdames al elenco adiestrado por Luis Carrasco, que logró el cetro de los superseniors y le entregó al portero su primera copa en una carrera de 40 años.