Camino de la Fruta
por Drago Domancic, gerente Corporación de Desarrollo Estratégico.
Que preocupados hemos estado con los constantes aplazamientos de la apertura del Camino de la fruta, pero este proceso nos deja buenas lecciones de las que debemos sentirnos contentos y a su vez mirar con detención lo que logramos en el trabajo conjunto y sistemático.
Recuerdo como si fuera ayer cuando la empresa concesionaria que se había adjudicado la Ruta de la Fruta pidió el termino anticipado del contrato debido a que los sobre costos ambientales no permitían que el proyecto se pudiese construir, sin duda un balde de agua fría, sin embargo, en la adversidad decidimos remontar y acelerar soluciones al problema de congestión que tendríamos con la ayuda de una consultoría experta y reuniones de trabajo logramos que se mejoraran las entradas, salidas y giros a ambos lados del puente Lo Gallardo y además el inicio de los estudios de Ingeniería para contar con un nuevo puente Lo Gallardo y del Acceso Norte a San Antonio y sur a Cartagena. Iniciativas que en su conjunto suman cerca de los $3.000 millones para la provincia.
De forma paralela, se comenzó la preparación del nuevo llamado a licitación del Camino de la Fruta, lo que ha significado un intenso trabajo de seguimiento y propuestas de mejoramiento y colaboraciones para evitar el estancamiento del proceso, pero una nueva contingencia surge y amenaza las posibilidades de contar con oferentes para adjudicar las obras ante un conflicto social que obstaculizaría la evaluación ambiental en el tramo entre Peuno y Las Cabras, por cuanto la modificación en el trazado en ese sector amenaza la ribera sur de río Cachapoal afectando a agricultores y residentes. Este momento fue particularmente crítico debido a que se vio afectado por el cambio en la presidencia del país, lo que significó la ampliación del plazo de estudio de un proyecto cuyo escenario de adjudicación era desfavorable.
En este momento como provincia logramos una virtuosa articulación pública privada en la cual concurrimos como provincia a plantear con claridad nuestras preocupaciones y por los efectos e impactos de un eventual fracaso de esta convocatoria y nos pusimos a disposición para colaborar en lo que fuese necesario. El resultado de estas gestiones ha permitido que el esfuerzo técnico y político por asegurar el éxito del proyecto sea una realidad en el menor plazo posible incorporando condiciones innovadoras y de flexibilidad que no se han visto en convocatorias anteriores por parte del MOP y que favorecen a nuestra Provincia.
Estamos optimistas en que lo que parecía un espejismo se aspecta con visos ciertos de realidad, concretándose el día 27 de diciembre con la presentación de oferentes y que el 22 de enero del próximo año sepamos quien será el adjudicatario de nuestro anhelado Camino de la Fruta.