José Carmona: el sanantonino que desafió a Martín Vargas
En 1997 el oriundo de la población Juan Aspeé se enfrentó a Martín Vargas por el título nacional de los súper moscas en el teatro Caupolicán. Esta semana fue encontrado fallecido en la Región de O'Higgins.
José Miguel Carmona Úbeda supo a la edad de 12 años que lo suyo sería el boxeo, el deporte que lo apasionó desde que se puso un par de guantes a escondidas de sus padres Daniel Carmona y Mercedes Úbeda, quienes no querían que su hijo siguiera la carrera de boxeador.
Sin embargo José Miguel, nacido y criado en la tradicional población Juan Aspeé de San Antonio junto a sus hermanas Lastenia y Silvia, hizo caso omiso a los consejos de sus progenitores y se lanzó hacia adelante igual como lo hacía en el ring, donde era conocido por ser un peleador de esos llamados "guapos" por su forma de presentarse ante el contrincante.
Su recuerdo como deportista permanece entre quienes lo conocieron junto al ring y en los gimnasio donde entrenaba.
Por eso la noticia de su deceso golpeó duro a la comunidad boxeril. Como diéramos a conocer en la edición de ayer de Diario El Líder, en la Sexta Región dejó de existir este sanantonino que sobre el cuadrilátero derramó sangre y sudor.
Un guapo
"Muchos boxeadores sanantoninos de los años setenta y ochenta eran reconocidos por ser guapos, de esos que eran difíciles de vencer. En aquella época San Antonio contaba con una asociación que se encontraba en calle Pudeto en el sector de Barrancas, además de tres clubes importantes: Ferroviarios, el Godfrey Stevens y el San Antonio, además de los boxeadores de la Escuela de Ingenieros Militares que participaban de los torneos.
Las peleas se disputaban en veladas repletas de público en el gimnasio Montemar y en el antiguo gimnasio Esparta que estaba en Barrancas.
"Entre las figuras estaban Cornejo, Moya, Ríos", recuerda el ex boxeador sanantonino Iván Corral, actualmente de 70 años de edad, quien asegura que José Miguel Carmona "era un boxeador guapo. Lo conocí por el asunto del boxeo durante la década de los setenta y luego seguí su carrera en los ochenta cuando se hizo profesional. Me acuerdo de él como una persona muy entusiasta que peleó el título nacional ante Martín Vargas. Ellos eran de la categoría súper mosca, 52 kilos y fracción, por lo que eran muy ágiles y rápidos en el cuadrilátero".
Contra Martín vargas
Justamente frente a la leyenda del boxeo chileno, Martín Vargas, el sanantonino José Carmona protagonizó un enfrentamiento en 1997 durante el regreso de "Pega Martín Pega" al ámbito profesional, luego de haber peleado por última vez en 1987.
Su hermana, Silvia Carmona Úbeda, recuerda que previo a la disputa por el cinturón nacional de súper mosca, los peleadores tuvieron un duelo en la comuna de Cartagena, donde se realizó una exhibición.
"Aquella vez Martín Vargas ganó por un margen pequeño y se llenó el cuadrilátero en Cartagena. Me acuerdo que era verano y viajó mucha gente desde San Antonio para apoyarlo. Se realizaron seis peleas y la última fue la de mi hermano contra Martín", detalla Silvia, quien justamente volvió a acompañar a José en la pelea por el título nacional súper mosca que se disputó el 2 de julio de 1997 en el gimnasio Caupolicán.
"Contratamos una micro que estaba a cargo de don Manuel Orellana junto a su señora que en paz descansa, y viajamos al Caupolicán con harta barra para ir a apoyar a mi hermano. A mí lo que me extrañaba era que él estaba muy débil, así que le pregunté qué le pasaba. Y me dijo que como estaba en sobrepeso lo tuvieron una semana haciendo dieta. De hecho, un periodista que lo conocía le dijo bien enojado que no debería haber peleado, porque él no era del mismo peso de Martín. El entrenador lo único que le advirtió era que no tenía que acercarse a Martín, porque mi hermano era de ir encima a pelear, siempre iba de frente. Cuando comenzó a pelear, iba todo bien, pero en un momento mi hermano se acerca y ahí es cuando Martín Vargas aprovechó para hacer el golpe que le entregó la victoria por K.O. y la pelea se acabó rápido", detalla Silvia, quien comenta que "lo importante fue que mi hermano era feliz con el boxeo y eso era lo que lo ponía siempre contento".
Una pasión
José Carmona estudió hasta octavo año en el colegio Fernández León y a los 12 años entró al boxeo. "De chico se motivó con este deporte, aunque lo hacía a escondidas de mis padres, por lo que nunca tenía permiso para pelear, ya que ellos no tenían idea. Él aprendió en un club de Barrancas y su primer entrenador fue Manuel Orellana Pavez, quien fue muy importante para su formación", reconoce Silvia Orellana.
Las primeras peleas amateurs que comenzó a disputar Carmona fueron en el Montemar a finales de la década de los setenta, representando al club de San Antonio. Posteriormente tuvo la posibilidad de ser seleccionado nacional de boxeo, instancia en la que representó a Chile por diferentes países de Sudamérica. Su carrera duró 18 años, entre 1980 y 1998. "Representó siempre de la mejor manera a San Antonio y gracias al boxeo pudo viajar a combates a Perú y Argentina, además de recorrer casi todo el país en su época amateur y profesional", agrega su hermana Silvia.
Puerto lejano
Pero como dice el refrán: "Nadie es profeta en su tierra". Y pese a que José Miguel Carmona llevó el nombre de San Antonio por varios cuadriláteros, no logró nunca encontrar una oportunidad laboral en la ciudad puerto y tuvo que emigrar a principios de los noventa hacia la ciudad de San Fernando.
"Allá lo apodaban el 'Che' Carmona, por la forma de hablar y expresarse, ya que le salía un acento medio argentino. En San Fernando estuvo haciéndoles clases a los más pequeños que se empezaban a dedicarse a este deporte. Por eso algunos le decían 'profesor', ya que estaba casi todos los días en la asociación de boxeo", cuenta Silvia Carmona, asegurando que "quizás a mi hermano no se le reconoció como el gran deportista que representó a San Antonio y eso a él le daba un poco de pena, ya que quizás merecía haber tenido más espacios en su ciudad de origen".
Última velada
El pasado 26 de enero, José Miguel Carmona, quien lamentablemente padecía de demencia senil desde hace algunos años, recibió una invitación para asistir a una velada de boxeo en Rancagua.
Fue acompañado por un dirigente de la asociación de San Fernando, que a su vez sería el presentador de las peleas, y quien había invitado al "Che" hacia la "Ciudad Histórica". "Lo dejaron sentado en la primera fila y estaban pendiente de que mi hermano no se fuera a ninguna parte, porque ya se había escapado otras veces. Y cuando era la última pelea, el presentador ve que Carmona sale y no regresó más al gimnasio", explica Silvia.
Desde aquel 26 de enero que el ex boxeador estuvo perdido, sin que su familia pudiera tener rastros de su paradero. "Con su ex señora fuimos a las radios, a la PDI, a la prensa escrita, tratamos de buscar toda la ayuda posible pero todos nos cerraban las puertas y nadie lo buscó. Nosotros como familia pegamos carteles y entre la gente del boxeo también se trató de ayudar para encontrarlo", relata la hermana del "Che" Carmona, cuyo cuerpo lamentablemente fue encontrado sin vida por un temporero durante el pasado martes 5 de febrero en Rancagua, a un costado de la línea férrea.
"La demencia senil se le estaba presentando constantemente, de hecho en los últimos dos meses había perdido el carnet de identidad siete veces", afirma su hermana sobre los últimos pasajes de la vida del ex boxeador José Carmona, quien durante el día de ayer fue velado en la ciudad de San Fernando, acompañado de sus cinco hijos, su familia, sus amigos y sobretodo por aquellos que aprendieron a boxear con pasión dentro de un ring, tal como lo hacía el querido "Che" Carmona cuando estaba defendiendo los colores de San Antonio.