Rodrigo Ogalde
El personal de dos ambulancias del Servicio de Atención Médica de Urgencia (Samu) del hospital Claudio Vicuña actuó con rapidez para salvarle la vida a un hombre que, cerca de las 10 horas de ayer, sufrió un ataque cardiaco en la vía pública. Sin embargo, el esfuerzo fue en vano porque Guillermo Aravena Loyola (65) finalmente falleció cuando era atendido en dicho centro asistencial.
El carpintero Juan Santis conoció a Guillermo Aravena porque más de alguna vez habían trabajado en la misma obra. Ayer se encontraron en las afueras de la construcción de un edificio en la Subida 21 de Mayo, en San Antonio. Ahí intercambiaron palabras y se dieron cuenta de que ambos andan buscando pega.
Les fue mal y juntos decidieron ir al sector de Camanchaca, donde hoy se levanta el nuevo edificio corporativo de la Empresa Portuaria de San Antonio. Casi en forma natural, Santis le ofreció a Aravena llevarlo en su camioneta hasta dicha obra.
"Veníamos conversando de lo mejor, yo venía manejando el vehículo cuando de repente se fue (desvaneció). Yo detuve el vehículo y comencé a decirle 'socio', 'socio, 'socio', pero no me respondía", relató Juan Santis.
Justo en esos momentos pasaba por el sector otro trabajador de la construcción que también iba a Camanchaca a ver si necesitaban carpinteros. Esa persona junto a Santis trataron de auxiliar a Guillermo Aravena, pero este no respondió. Llamaron a Carabineros y, en pocos minutos, llegaron dos ambulancias del Samu.
TRASLADo
En el mismo lugar, los funcionarios del Samu le practicaron maniobras de reanimación a Guillermo Aravena. Santis señaló que su amigo ya apenas tenía pulso.
Luego de que su amigo Guillermo fuera trasladado al hospital local, Juan Santis admitió que se sintió muy asustado cuando lo vio desvanecerse al interior de su camioneta, por lo que no dudó ni un instante en salirse de la calzada y estacionar a un costado de la calzada para ver qué le pasaba.
En horas de la tarde de ayer, fuentes de Diario El Líder confirmaron que el cuerpo de la víctima sería entregado a sus familiares después de la autopsia que se le realizaría en la morgue del Servicio Médico Legal.
10.45 horas ocurrió este hecho que terminó con la vida del trabajador Guillermo Aravena.