Pesar por repentina muerte de dirigente vecinal de Llolleo
A la edad de 57 años y víctima de un infarto, la tarde del lunes pasado murió el dirigente de la Junta de Vecinos Los Aromos, de Llolleo Alto, Luis Onofre Moya González.
El querido vecino llolleíno sufría de una enfermedad cardíaca. Por eso, cuando sus compañeros de trabajo en la Asociación de Buses de San Antonio vieron que se sintió mal, de inmediato lo llevaron al hospital. "El Moyita" era jefe de servicios de la línea conocida como "Los Palta Mayo".
Pero el destino de este hombre ya estaba escrito. A las 19.50 horas dejó de existir y con ello sus familiares se llenaron de pena. Su hija Nataly y su pareja Magaly Carrasco lo lloran tanto como sus padres, Angel Moya y Zulema González, que aún sobreviven.
Carolina Moya, sobrina del fallecido vecino, contó a Diario El Líder que "mi tío era una persona súper alegre, muy dicharachero y siempre con una talla por delante. Su muerte tan repentina nos ha dejado a todos sorprendidos y con mucho dolor".
Gran pena también existe en los dirigentes de la Junta de Vecinos Los Aromos, donde él era director. Paola Améstica González, la timonel de dicha organización expresó su tristeza ante el deceso de su compañero de labor. "Su muerte caló hondo en nosotros porque él era muy cooperador y siempre estaba ayudando a la comunidad. Él era muy bueno pa´ la talla y siempre fue muy humilde. La gente del barrio está consternada con su partida", dijo ella.
Sus restos están siendo velados en la casa de sus padres y de su hermano Roberto, ubicada en calle Domingo García Huidobro 1506, Llolleo. Hoy, tras un responso que se hará a las 11 horas en ese lugar, será sepultado en el Parque del Sendero. Los vecinos prepararon un digno homenaje para un hombre al que también extrañarán sus tres pequeños nietos, Nicolás, Agustina e Isabella.