La querida profesora que será condecorada como Hija Ilustre
Eliana Rojas dedicó toda su vida profesional a la docencia y ahora será galardonada por la Municipalidad de San Antonio. Es un gran reconocimiento para una mujer cuya abuela, madre e hijas también son profesoras.
El próximo lunes 6 de mayo, la profesora sanantonina Eliana del Carmen Rojas Silva será condecorada con un galardón que nunca pensó que le llegaría. Después de que el concejal Luis Órdenes postulara su nombre ante el Concejo Municipal de San Antonio, la docente, de 66 años (21 de enero 1953), tendrá el privilegio de ser nada menos que Hija Ilustre de la comuna, un reconocimiento que deja claro su enorme legado dentro de la educación básica sanantonina.
"Estoy súper agradecida por la postulación que hizo el concejal Luis Órdenes. Por eso cuando me llamó para avisarme fue una grata sorpresa que nunca me lo esperé, aunque yo siempre me sentía hija ilustre por todo lo que he entregado a la educación y la docencia. Este reconocimiento no es solamente mío, sino que también de la gente que durante todos estos años ha caminando conmigo: los apoderados, estudiantes, los exalumnos, los colegas y toda la gente que confió en mí y creyó en mis locuras, porque hay que ser medio loca para hacer un cambio en esta sociedad", afirma, agregando que también "es un premio para mi familia y mis tres hijas: Carolina, Patricia y Camila, que son profesoras y trabajan en escuelas municipales en San Antonio".
Familia de profesoras
No resulta extraño que las tres hijas de Eliana Rojas hayan seguido los pasos de la docencia. La nueva Hija Ilustre siguió a su vez la profesión que desarrollaron su abuela y su madre.
"Soy de familia de profesores. Mi abuelita materna, Manuela Cereño, era preceptora en el sector de Lo Abarca y mi madre, Marta Eliana Silva Cereño, fue profesora durante muchos años en la escuela España, donde sacó muchas generaciones de sanantoninos. Antes de eso estuvo en la escuela de Rapel, donde conoció a mi padre, Juan Rojas Maldonado, muy conocido por todos como 'Rojitas', porque era parte del club deportivo San Antonio Atlético y su vida prácticamente era el fútbol", detalla.
La sanantonina realizó su enseñanza escolar en la escuela 3 de niñas, en la escuela España y en liceo Fiscal, desde donde egresó de cuarto medio en 1972.
"Ahí me fui a estudiar a la escuela Normal Abelardo Núñez, en Santiago, para ser profesora en educación básica. Entré en 1973, por lo que después del golpe militar terminaron las escuelas normales y se crearon en las universidades los pedagógicos. Así que no pude seguir estudiando, ya que no pude, porque la educación comenzó a ser pagada, a diferencia de la escuela normal que era gratuita", recuerda Rojas, quien realizó inmediatamente un curso de arsenalería y se devolvió a trabajar al hospital Claudio Vicuña como arsenalera en pabellón, donde estuvo cerca de dos años.
"Fue un trabajo muy lindo pero no me llenaba del todo, no me sentía satisfecha con lo que hacía, me faltaba algo. Hasta que realicé mi primer reemplazo como profesora básica en la escuela 3 de niñas donde era exalumna. En ese tiempo, siendo egresado de cuarto medio, se podía trabajar en educación, entonces solicité a la dirección provincial de educación poder realizar el reemplazo y me entregaron esa posibilidad, ya que también tenía antecedentes de haber estudiado en la escuela Normal. Luego estuve en la escuela 5 y posteriormente me mandaron a la escuela 24 que estaba en la población Juan Aspeé, la que actualmente no existe. En 1985 la escuela se cayó producto del terremoto y trasladaron el recinto hacia la población 30 de Marzo, donde construyeron la escuela San José de Calasanz, en la que estuve 14 años trabajando", explica.
-¿Cómo fue la experiencia en dichas escuelas sanantoninas?
-Eduqué a muchas generaciones de alumnos, por lo que tengo los mejores recuerdos de todos esos años de trabajo. Por ejemplo, conocí a mucha gente de la población Juan Aspeé que era muy comprometida con la educación y muy esforzada. Hay muchos exalumnos que tuve de chicos que son profesionales y que son grandes personas. Y también tengo buenos recuerdos de la escuela San José de Calasanz. Hice clases desde primero a octavo básico, con buenas generaciones y chiquillos con los que aún mantengo contacto hasta el día de hoy.
Hacia tejas verdes
Tras su paso por la escuela San José de Calasanz, volvió a pedir trasladado, siendo designada a la escuela Pedro Viveros Ormeño que se encuentra en Tejas Verdes.
"Tengo los mejores recuerdos de varios colegas, como Glenda Salgado, Armando Leiva y José Ovalle. Llegué trabajando como profesora y al poco tiempo fui jefa técnica, y cuando Glenda Salgado jubiló de directora, asumí ese puesto en el 2013, cargo en el que estuve durante tres años", comenta la docente que se acogió a retiro en la escuela Pedro Viveros Ormeño en 2016.
-¿Qué fue lo mejor de su paso por la escuela Pedro Viveros Ormeño?
-Junto a los profesores hicimos cambios bien importantes en el establecimiento. Cuando llegué estaba en peligro de cierre por la baja matrícula y los cursos estaban combinados. Formamos un equipo de gestión y comenzamos a hacer transformaciones, donde, por ejemplo, nos permitieron separar cursos para aumentar las matrículas. También hicimos una petición al Ministerio de Educación para eliminar el ramo de religión y transformarnos en una escuela laica. Para nosotros fue un cambio importante, ya que a los alumnos no les gustaba el ramo de religión y no le tomaban importancia. Aparte, en ese tiempo comenzaron todas las manifestaciones sobre la calidad de la educación y nos aprovechamos de aquella contingencia para realizar este determinante cambio, el que estuvo también apoyado por los apoderados.
-¿Qué otro buen recuerdo tiene de la escuela de Tejas Verdes?
-Nos convertimos en una escuela inclusiva, ya que recibimos a alumnos con necesidades educativas especiales y ese fue otro cambio importante. Y los niños que no querían irse a la escuela especial, eran recibidos por nosotros. Hicimos un trabajo con toda la comunidad escolar para tener un buen trato y entender que hay niños diferentes que tienen todo el derecho a estudiar y que merecen respeto, por lo que se realizó un trabajo muy bonito en el tema de la inclusión.
Debido a este buen trabajo realizado como directora de la escuela Pedro Viveros Ormeño, Eliana Rojas fue postulada por el Daem de San Antonio para ser parte de un programa que está realizando la Universidad Católica de mentoría (asesoría) para un grupo de directores noveles en las provincias de San Antonio y en la comuna de Las Cabras, en la Sexta Región.
"Mi gestión como directora fue calificada como excelente y cuando la Universidad Católica le preguntó al Daem por nombres de directores que estuvieran retirados, entregaron el mío y así me llamaron desde la universidad para integrarme a un equipo de mentores para realizar un programa de inducción para directores nuevos. Este programa es parte de la reforma educacional y comenzamos a realizarlo en 2017. Actualmente estamos trabajando en los colegios People Help People y el Bicentenario Javiera Carrera", cuenta la docente que sigue vigente dejando un legado gracias a sus conocimientos en los cargos de dirección.
Una agradecida
La querida profesora Eliana Rojas Silva quiere aprovechar la ocasión para agradecer por todos estos años de trabajo que tuvieron la guinda de la torta con el nombramiento de Hija Ilustre de San Antonio.
"Este reconocimiento no es solamente mío, sino que también de la gente que me acompañó en esta carrera. Como por ejemplo, dirigentes sindicales de distintos sectores que conocí cuando fui presidenta de la CUT provincial, que apoyaron mi gestión y con quienes mantuvimos un gran diálogo. Destaco en especial a don Segundo Ampuero y a todos los compañeros y compañeras que me ayudaron en todas las cosas que hacíamos. Y recordar también que llegué a la CUT gracias a que fui presidenta del Colegio de Profesores durante dos ciclos, donde mi profesión y liderazgo me permitieron rodearme de muchas personas valiosas del sector público. También tengo que reconocer a todos los alumnos, apoderados, colegas y a mi familia, porque este galardón de Hija Ilustre es parte de todos ellos".