Camionero quedó parapléjico tras accidente y está en riesgo vital
Cristian Sepúlveda (52) se encuentra internado en Viña del Mar. Necesita urgente dadores de sangre.
El 19 de abril pasado cambió la vida de toda una familia de Cartagena. Ese día el jefe de hogar, Cristian Sepúlveda Muñoz (52), sufrió un grave accidente de tránsito que lo mantiene en riesgo vital.
Sepúlveda Muñoz salió rumbo a Santiago conduciendo un camión cargado cuando, por motivos que deberán ser investigados, cayó desde la Autopista del Sol hacia la caletera, en cercanías de Leyda.
Producto del accidente, la cabina del camión -que pertenece a la empresa donde trabaja el afectado, Transportes Morros de Malvilla- resultó destrozada. Dentro de ella el chofer quedó severamente herido, con lesiones de tal magnitud que incluso está parapléjico. Los médicos indican que no volverá a caminar.
"Fue trasladado al hospital Claudio Vicuña, luego al van Buren de Valparaíso, al IST de Viña del Mar y al Hospital Naval. Sigue con ventilador mecánico para poder respirar. No podrá caminar y por ahora apenas se puede comunicar, lo hace con leves gestos", relató Soledad Arévalo, esposa del malogrado trabajador.
Desde que está hospitalizado ha tenido solo leves mejorías, pues su estado aún es crítico. "Él es el sustento de nuestra familia, tenemos tres hijos de 14, 18 y 23 años, más un nieto que vive con nosotros, estamos luchando por salir adelante, ha sido muy difícil", reflexionó Soledad.
El diagnóstico médico de Cristian Sepúlveda es desolador: transección aórtica torácica (daño gravísimo en el corazón), traumatismo encéfalo craneal y traumatismo raquiomedular (fractura en el cuello).
Dadores
Debido al delicado estado de salud del conductor, quien se mantiene en la Unidad de Tratamiento Intensivo (UTI), se requieren diez dadores de sangre.
Quienes puedan colaborar deben dirigirse al Instituto de Seguridad del Trabajo (IST) de Viña del Mar (ubicado en calle Álvarez 662) y donar sangre de cualquier tipo a nombre de Cristian Sepúlveda Muñoz.
Se atiende de lunes a jueves de 8.30 a 18 horas, los viernes de 8.30 a 13 horas y el sábado de 9 a 11 horas.
Debe tener entre 18 y 60 años, tener buena salud e ir después de ingerir alimentos.
"Cuando me avisaron del accidente llegué como pude al lugar. Estoy muy agradecida de funcionarios de Seguridad Ciudadana de Cartagena porque me llevaron. Al ir me di cuenta que esto era muy grave", expresó Soledad.