Diseñan pisciculturas para criar anguilas en China
Desde el 2013 que el ingeniero sanantonino Felipe Esquivel lidera la filial local de la empresa danesa Billund, pionera en el mundo en el desarrollo de cultivos marinos en tierra.
En una oficina ubicada en calle Del Canelo, pleno centro de Llolleo, se realiza hace dos años un proyecto que será ejecutado próximamente nada menos que en la ciudad de Guangze County, en China.
Miles de kilómetros de distancia que sin embargo están unidos en este trabajo gigantesco que se desarrolla en la filial sanantonina de la empresa Billund, cuyas oficinas centrales se encuentran en la ciudad de Dinamarca que lleva el mismo nombre y que es pionera alrededor del mundo en el diseño, construcción, instalación y puesta en marcha de pisciculturas de recirculación, especializándose en el desarrollo de plantas de cultivo marinos en tierra.
Fue justamente el ingeniero sanantonino Felipe Esquivel Verdejo (39 años), el que comenzó a trabajar con la compañía danesa durante el 2010 en la ciudad de Puerto Montt.
"Estudié Ingeniería Mecánica en la Universidad Santa María en Valparaíso y luego de titularme, el 2006 me fui a vivir a Puerto Montt porque allá se había trasladado mi familia. Allá entré a trabajar a la empresa Billund que abrió una oficina en esa ciudad como jefe del departamento de Ingeniería y hace siete años que formamos la oficina de Billund en San Antonio a finales del 2013. Me vine porque mi familia estaba acá y pese a que había renunciado a la empresa, seguí ligado a ellos porque estaba desarrollando un proyecto grande en China y para tener continuidad lo terminé a distancia. Me armé una oficina en la casa, me comunicaba por Skype y así estuve funcionando. Después de eso pasó un año más y la empresa se ganó varios proyectos más y ahí abrimos la primera oficina en Llolleo en el 2014 y que se encontraba en avenida Providencia. En ese lugar estuvimos trabajando durante tres años", detalla Felipe Esquivel.
Debido a que la empresa danesa Billund comenzó a crecer dentro de su especialización, la filial sanantonina también empezó a involucrarse en más proyectos tanto en Chile como en el extranjero.
"Primero empezamos con una dibujante, dos ingenieros y con el tiempo tuvimos que recurrir a más profesionales, porque la empresa creció y se estableció como líder en el mundo de recirculación de agua con proyectos muy importantes. Por ejemplo, desarrollamos un proyecto para cultivar salmones en Miami, que era algo que nadie pensaba que se podía hacer", comenta Esquivel, agregando que "desde que abrimos la oficina acá en San Antonio trabajamos solamente para proyectos que se venden en Dinamarca pero que se pueden ejecutar en todo el mundo".
Proyecto en china
Actualmente, la oficina sanantonina está trabajando en un gran proyecto que será desarrollado en China. "Haremos una piscicultura en China para cultivar tres especies de anguilas: europea, americana y japonesa. En total se producirán 13 mil toneladas de anguilas al año, eso es más de lo que produce la Unión Europea en su conjunto", explica Esquivel, agregando que "esta planta tiene dos etapas: primero para las anguilas que van creciendo se construirán tres edificios de una hectárea cada uno; y cuando pasan a la etapa de adulto tendrán diez edificios de dos hectáreas cada uno. Aparte de eso habrá plantas de tratamiento de agua de las aguas residuales".
-¿Cómo ha sido desarrollar este proyecto tan importante?
-Muy bueno. Llevamos dos años diseñando este trabajo. Actualmente somos cinco profesionales divididos en distintas áreas: las dibujantes Bárbara Novani, que es sanantonina y Daniela Almarza, que es viñamarina pero vive hace años en San Antonio; y los ingenieros calculistas Claudio Zamorano, que es de Peñaflor y Diana Linares que es de Venezuela.
-¿Cómo es esto de trabajar en un proyecto para China desde una oficina en Llolleo?
-La verdad que nosotros hacemos un trabajo que es bien 'underground' por decirlo de alguna manera, porque no nos relacionamos directamente con el comercio local. Por ejemplo a veces nos preguntan 'van a hacer una piscicultura, la van a construir en Algarrobo, o por acá cerca", y no dimensionan que son mega proyectos para otros países.
-¿Han diseñado proyectos para Chile?
-El proyecto anterior que diseñamos se está terminando de construir actualmente en Porvenir, en Tierra del Fuego, que será próximamente la piscicultura más grande del país para el cultivo de salmones. La realizamos el mismo equipo de trabajo. Sin embargo ese proyecto no alcanza las dimensiones del que realizaremos para China, ya que será una mega piscicultura.
-Están demostrando que desde San Antonio se pueden hacer cosas grandes.
-Así es. Nadie piensa que acá se está diseñando una planta para cultivar salmones en Miami o anguilas en China. Es algo aún desconocido el mundo de la recirculación. Por eso que digo que acá en San Antonio se pueden hacer cosas y sobre todo de buena calidad. De hecho no hemos tenido ningún problema con los proyectos que hemos diseñado acá. Por ejemplo hicimos dos proyectos para Tazmania y los clientes quedaron felices, porque era la mejor calidad de agua que habían tenido.
Oficina tecnológica
Una de las características que tiene la filial sanantonina de la empresa danesa Billund es que la oficina está capacitada con la última tecnología.
"Nosotros hacemos mucho uso de la tecnología para nuestro trabajo. Tenemos un enlace de fibra óptica directo a la oficina, porque necesitamos una capacidad de internet importante. Tuvimos que hacer una instalación con servidores especiales para conectarnos", cuenta Felipe Esquivel, destacando que también tienen un horario flexible de trabajo, ya que según su visión "trabajamos con objetivos, por lo que si alguien tiene algo que hacer o tiene algún imprevisto, hay que pensar en las necesidades de cada persona".
-Con todos estos años de trabajo, ¿le pareció una buena decisión retornar a San Antonio?
-La verdad que sí, porque estoy en un buen trabajo y si bien hay varias cosas que se podrían ir mejorando, es agradable para vivir. Y si bien pensé después de titularme e irme a vivir a Puerto Montt que no volvería a San Antonio, ahora retorné y quiero ser un aporte para el desarrollo de la comuna.