Carlos Rodríguez Ilabaca
Finalmente, después de vivir largas horas de amargura, la pareja conformada por Sergio Valedor Dos Santos y Eliane Melo comprobó en carne propia la veracidad de la clásica canción nacional que dice "y verás como quieren en Chile al amigo cuando es forastero".
El pasado lunes 16 estos turistas llegaron en su jeep Land Rover al balneario de Algarrobo tras recorrer gran parte del sur del país. Se bajaron a tomar fotografías de la piscina del condominio San Alfonso del Mar y, cuando volvieron, se encontraron con una desagradable escena: delincuentes habían quebrado un vidrio del vehículo para robarles su dinero, las tarjetas bancarias, sus documentos y una cámara fotográfica.
El caso apareció en Diario El Líder, lo que les sirvió para conocer la solidaridad de los habitantes de la provincia de San Antonio.
"Al otro día del robo estuvimos en El Quisco y en El Tabo. En esta última ciudad la gente y los comerciantes se portaron muy bien con nosotros", contó Sergio en un entendible portuñol.
"Nos paramos en el jeep en la calle y la gente que había visto el diario se acercó a ayudarnos. Nos dieron dinero, agua y mucha comida. Hasta la gente de un restaurante nos invitó a comer. Fue muy reconfortante recibir la solidaridad de los vecinos y de los comerciantes después de la mala experiencia que tuvimos en Algarrobo", resaltó la pareja que reside en Florianópolis, en el sur de Brasil.
Incluso, Sergio y Eliane elaboraron un cartel para expresar su felicidad por la colaboración y el cariño cosechado en la provincia de San Antonio. "Hasta chocolate caliente y bebidas nos dieron", subrayó Sergio, quien ayer se preparaba para viajar a la Embajada de Brasil en Santiago con el propósito de recuperar los documentos que perdieron en el robo y así poder continuar su larga travesía.
"Antes de regresar a Brasil nos gustaría conocer Iquique, Antofagasta y San Pedro de Atacama", reveló la pareja.
A la policía
Sergio y Eliane se mostraron especialmente agradecidos de los carabineros que los controlaron durante su paso por el Litoral Central.
"Los policías también habían visto el journais (diario) y nos trataron muy bien. Nos dijeron que no nos preocupáramos por los documentos porque sabían que nos habían robado. El apoyo que nos dieron fue único y espectacular", culminó la pareja, que confesó que la comuna de El Tabo quedará para siempre en sus mentes y corazones.