Bodas Express "Sí, quiero"
Sin invitados ni mayor organización: así de simple fue el matrimonio de Jake y Alicia, dos chilenos que dejaron la región y se fueron a vivir el sueño americano.
"Nos casamos en una de esas iglesias express y estuvimos solos los dos porque no tenía a nadie de mi familia en aquel momento en Estados Unidos y ella tampoco",
Jake Alvarez,, oriundo de El Quisco
en Las Vegas
Con el deseo de "emprender en un lugar diferente", Jake Álvarez se despidió de su familia en El Quisco y se fue a vivir a Salt Lake City, en el estado de Utah, Estados Unidos. Allí, en marzo de 2013, asistió a un baile para solteros de su iglesia mormona y conoció a Ameena, una sueca que se encontraba en el mismo sitio por estudios. "A tan sólo dos meses de conocernos decidimos casarnos y ya llevamos siete años de matrimonio. Estamos muy felices porque aunque nuestras culturas son diferentes, hemos sabido encontrarnos en el medio y poder disfrutar de ambas culturas y traspasarlas a nuestros seis hijos", dice Jake Álvarez.
Para casarse, la pareja viajó hasta LasVegas, en el estado de Nevada, porque no tenían con quien celebrar su enlace. "Nos casamos en una de esas iglesias express y estuvimos solos los dos porque no tenía a nadie de mi familia en aquel momento en Estados Unidos y ella tampoco", consigna.
Jake Álvarez cuenta que antes de que llegaran al altar, tuvieron que entregar sus identificaciones personales en el Clark County Marriage Bureau, una oficina similar al Registro Civil de Chile. "Al momento de presentar las identificaciones, ellos te dan un documento en el cual dice que el estado de Nevada te autoriza para casarte. Después ese mismo documento lo presentas en cualquiera de las iglesias que están en Las Vegas y te puedes casar el mismo día", explica.
Actualmente, Jake Álvarez es gerente de operaciones en Amazon y Ameena es abogada. "Ella no ejerce en este momento porque está dedicada 100% a la casa ya que tenemos niñas pequeñas (cinco hijas y un varón). No tengo más familia acá, somos solo nosotros", manifiesta.
Respecto del idioma, el hombre destaca: "El idioma oficial de la casa es el inglés, pero los niños entienden español. No lo hablan tanto porque por motivos de trabajo no tengo mucho tiempo para practicar con ellos, pero mi esposa se comunica con ellos prácticamente solo en sueco".
"Casémonos hoy"
En 2012, desde la zona rural de Santo Domingo, Alicia Jiménez se contactó por internet con Christopher Leiva, un ciudadano norteamericano cuyo padre es chileno. Según dice, ingresó a una red social para hacer amigos, pero al final encontró el amor. "A él le interesaba hacer amistad con alguna chilena porque en sus planes estaba viajar a Chile y visitar a su familia", aclara desde Las Vegas.
Un año después, Christopher Leiva viajó a Chile y conoció a Alicia. Iniciaron una relación sentimental, y en 2014, ella se quedó a vivir en Estados Unidos, porque se enteraron de que iban a ser padres de su primera hija. El matrimonio fue en 2017, cuando nació la segunda hija. "Llegó una tarde y me dijo: 'Casémonos hoy'. Eran como las tres de la tarde y teníamos que hacer unos trámites para que el matrimonio fuera legal (...) Buscamos una iglesia que cumpliera todos los requisitos que queríamos y nos casamos en la última boda de las 23 horas. Nos costó 200 dólares ($142.280), más la propina al juez y al fotógrafo. Lamentablemente no tuve un Elvis porque nos casamos muy tarde", relata riendo.
Alicia y Christopher, quienes tienen una tienda de mascotas, dieron el sí en Las Vegas porque aprovecharon la llegada de unos familiares que viven en otro estado. "No tenemos más familia aquí, pero como las bodas las pasan en vivo por el sitio web de la iglesia, los familiares que no puedan asistir o que estén en otro país, las pueden ver así", cuenta.
Por Cinthia Matus O.
cronica@lidersanantonio.cl
¡Vivan, Las Vegas!
Además de las capillas, las parejas se pueden casar en los grandes hoteles que ofrecen bodas en la ciudad. De allí que la oferta sea tan variada y que la gente pueda casarse por menos de US$150 ($108.000). Sin embargo, una boda tradicional con testigo, flores y fotógrafo vale US$300 ($217.000) y si quiere con un doble de Elvis Presley, el costo sube un poco. También está la opción del helicóptero.